El coronavirus no es la única pandemia que los mexicanos tenemos que sortear.
El panorama de la salud mental se avizora retador, destacaron especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Los problemas de salud por supuesto que se han incrementado y se han agravado durante la pandemia y las necesidades de atención también se han incrementado y no necesariamente se han incrementado los servicios”, señaló Benjamín Guerrero López, jefe del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UNAM.
Informes internacionales reportan que, en México, los niveles de ansiedad y depresión se dispararon por la pandemia.
La ansiedad, antes de la pandemia, se presentaba en 15% de la población, situación que se modificó con un alza de 50%.
La depresión que, hasta marzo de 2020 se calculaba en 3% de la población, aumentó hasta abril de este año a 27.6%.
Hay problemas de salud mental que surgieron a partir de la pandemia y la razón fue la cuarentena porque la cuarentena fuerza al ser humano a modificar de una manera radical cómo se lleva con las personas con las que vive”, indicó Juan José Sánchez Sosa, académico de la Facultad de Psicología de la UNAM.
Sin embargo, para quienes ya padecían trastornos mentales el encierro empeoró su situación.
Algunos de los problemas que se dieron, por ejemplo, en mayo pasado, ya estaban ahí desde antes, ya había problemas que se habían desarrollado en la familia desde antes que ocurriera esta especie de convivencia forzada en la casa y lo que hizo la pandemia fue deteriorarlos todavía más”, puntualizó Juan José Sánchez Sosa.
Extraoficialmente, se estima que uno de cada 10 mexicanos, vive con un trastorno de salud mental.
Especialistas alertaron la necesidad del diagnóstico oportuno para esta población.
Tenemos que buscar la manera de tener unas detecciones tempranas, porque en el momento que se detecta un problema hay que atenderlo, no hay que dejar que el problema crezca porque si bien es cierto, hay problemas que son crónicos, el hecho de atenderlos de forma temprana disminuye el impacto que tiene ese problema en la vida de esa persona”, mencionó Benjamín Guerrero López.
Para detectar algún problema en la salud mental es necesario atender síntomas como son:
- Tristeza
- Ansiedad
- Irritabilidad
- Sentimiento de culpabilidad
- Cambios en el apetito
- Pensamientos de muerte o suicidio
- Dolores
- Calambres
- Problemas digestivos sin una causa física clara
Por otra parte, el insomnio o la apnea obstructiva del sueño, que la padecen uno de cada cuatro mexicanos, puede ser un factor de riesgo para complicaciones graves de COVID-19 .
La apnea es una condición pro inflamatoria, las personas con apnea podríamos decir, viven ya en un estado de inflamación. Si sobre este estado de inflamación viene Una infección por Sars Cov-2, probablemente esta inflamación multiplicada es lo que explique porque las personas con apnea de sueño tienen más posibilidades de desenlaces fatales o evoluciones más graves”, dijo Alejandro Jiménez Genchi, coordinador de la Clínica del Sueño del Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente.
Este 10 de octubre, se conmemora el Día Mundial de la Salud Mental.