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Turismo estético: nuevo atractivo que millones buscan en Albania

FOTO: AFP

Antes uno de los países más cerrados del mundo, Albania acoge actualmente a millones de turistas, entre ellos muchos que buscan una sonrisa más radiante, unos labios más carnosos o modificar a la “perfección” cualquier parte de su cuerpo.

“No me gusta hablar de turismo médico. Es un poco duro, da miedo… Prefiero hablar de turismo de felicidad, que deja a la gente contenta”, explicó Dritan Gremi, jefe de una clínica dental de Tirana, la capital del país balcánico.

Su centro ofrece cuidados de alta calidad con un material “garantizado y certificado” con las normas europeas.

Italianos, franceses, belgas, suizos…clientes de múltiples nacionalidades acuden a la clínica Gremi, que proponen aprovechar estos tratamientos estéticos o dentales para descubrir el país.

Según sus autoridades sanitarias, Albania ofrece procedimientos dentales a precios competitivos sin comprometer la calidad del tratamiento.

Stéphane Pealat, un francés de la pequeña ciudad de Valence, y su hermano, arrastraban numerosos problemas dentales, como abscesos y pérdida de piezas.

“En Francia nos hicieron un primer presupuesto que era muy muy caro. Después empezamos a buscar en internet: Bulgaria, Turquía, Albania, España…”, explicó Stéphane Pealat.

Los equipos albaneses viajaron a Lyon, a un centenar de kilómetros de Valence, para presentarles sus ofertas y allí escucharon hablar de la clínica Gremi. Después de un primer desplazamiento en agosto “para ver” los locales y la ciudad, los dos hermanos decidieron volver unos meses después.

En Francia, el coste del tratamiento era de 50 mil euros, sin embargo, el mismo procedimiento costó 13 mil 500 euros en Albania.

“Es una suma considerable, pero para gustar, tener una sonrisa bonita es importante. Lo hago por mí, pero también por mi pareja, que tiene unos “superdientes”, afirmó Pealat.

Nathalie Gangloff, animadora en una residencia de ancianos en Cognac, en el suroeste de Francia, también eligió solucionar sus problemas dentales en Albania.

“El médico que me trataba en Francia me habló de un reportaje que vio por la tele, explicó la mujer que se gastó un poco menos de 15 mil euros, contra los 42 mil presupuestados en su país.

Después de una primera intervención en febrero para extraer y colocar implantes, volvió en septiembre a Tirana “contenta” de haber recuperado la sonrisa.

“Con mi trabajo de animadora, es importante estar bien peinada, tener unos dientes bonitos”, explicó sin esconder su alegría.

“Bella en todas las edades”

Los bajos costes de gestión y una fiscalidad que no supera 15% permiten a las clínicas albanesas ser muy competitivas y hacerse un hueco en el mapa del turismo médico. La facturación del sector se estima entre los 200 y 250 millones de euros.

FOTO: AFP

Anna Maria, una italiana llegada de Milán, aprovechó sus vacaciones en Albania para colocarse fundas dentales y, de paso, operarse los labios. “La sonrisa del alma pasa también por los labios”, afirmó la también psicóloga.

“Después de los cuidados dentales, cada vez hay más turistas extranjeros que recurren también a procedimientos estéticos para iluminar su sonrisa”, explicó Monika Fida, dermatóloga y profesora universitaria en Tirana.

Gustan mucho las inyecciones de ácido hialurónico, con certificados aprobados por la Unión Europea.

“Quieren ante todo sentirse bien, lo más natural posible y tener labios bien definidos”, afirmó Fida, que acoge cada año en su clínica a entre 750 y mil pacientes extranjeros.

No hay muchos datos oficiales disponibles sobre la magnitud del fenómeno. Pero una de las pocas estadísticas existentes señala que cada año 50 mil italianos viajan por motivos médicos a Tirana.

Una de ellas es Vera Panaitov, jefa de cocina en Verona, en el norte de Italia, que debe repararse los dientes. Pero una vez en la clínica, ha decidido también hacerse los pechos y reducir su cintura.

“Hay que estar bella en todas las edades y vivir en cada momento el amor y la felicidad”, dijo sonriente la mujer de 60 años en su cama de hospital, del que saldrá en unos días “contenta y rejuvenecida”.

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