En septiembre de 2019 la muerte de 12 personas llamó la atención de las autoridades sanitarias de Estados Unidos.
Las víctimas tenían algo en común: todas habían inhalado acetato de vitamina E, sustancia grasosa que combinada con nicotina y tetro-hidro-cannabinol, compuesto activo de la mariguana, causa estragos en el funcionamiento pulmonar.
“Este tipo de mortalidad se dio básicamente en personas de menos de 35 años, es decir eran muy jóvenes y todos tenían el antecedente de haber utilizado o un cigarrillo electrónico o un vapeador”, comentó Guadalupe Ponciano Rodríguez, coordinadora del Programa Prevención del Tabaquismo, UNAM.
Esta situación puso en alerta a la Secretaría de Salud, que el 28 de septiembre de 2019 emitió un aviso epidemiológico por el uso de vapeadores y cigarrillos electrónicos.
Un estudio de la Facultad de Medicina de la UNAM reveló que 4 millones de adultos en México son adictos a los vapeadores.
La situación se salía de control y ameritaba medidas extraordinarias.
El 31 de mayo de este 2022, la Secretaría de Gobernación publicó un decreto en el Diario Oficial de la Federación para prohibir la venta y circulación de cigarrillos electrónicos y dispositivos vaporizadores. Sobre el derecho a la libertad, se imponía velar por la salud de los mexicanos.
“Es cierto que la prohibición pudiera generar que hubiera más dispositivos en el mercado negro, pero no podemos cuestionar una medida de esta naturaleza genera una concientización a la población que no pudieran generar otro tipo de políticas nada más de fomento sanitario”, sostuvo Bertha María Alcalde Luján, comisionada de Operación Sanitaria de la Cofepris.
Sólo entre julio y septiembre de este año, la Cofepris aseguró 10 mil 920 vapeadores e insumos vaporizantes en todo el país y clausuró 40 locales de venta.
El decreto inhibió parcialmente el comercio de estos peligrosos artículos, pero no la detuvo. El número de usuarios de 12 a 17 años crece a un ritmo acelerado de 21% al año.
Y las redes sociales son una vitrina para las marcas, que se reproducen como hongos.
“Hemos encontrado más de 300 marcas en los operativos que hemos realizado, desafortunadamente si bien los esfuerzos de vigilancia se han fortalecido todavía y algunos lugares en donde se siguen encontrando estos dispositivos, algunos por ejemplo se venden por Internet”, sostuvo Bertha María Alcalde.
Y otros de manera legal…
En agosto, la conocida cadena de tiendas Sanborns obtuvo un amparo definitivo de un Juez de Distrito para comercializar la marca de cigarros electrónicos Iqos que fabrica el gigante tabacalero Phillip Morris.
El Iqos es un cigarrillo híbrido que se promociona como un sistema de tabaco calentado, sin fuego, sin humo, ni ceniza. Y el tabaco en México es legal, pero mediante la vaporización tiene el mismo efecto que los vapeadores, según los expertos.
“Ellos lo que están queriendo es que se cambien los cigarrillos de tabaco por este tipo de cigarrillo híbrido con esa idea. No hay combustión pero si hay calentamiento y lo que se está calentando es el tabaco y el tabaco como lo veas va a tener nicotina y la nicotina como lo digas te va a provocar adicción”, añadió Guadalupe Ponciano.
No puedes dejar que siga prevaleciendo la cuestión económica de las tabacaleras sobre la salud de la población, definitivamente, dijo.
Se trata de un peligro latente, porque a partir de 2030 Phillip Morris proyecta sólo vender cigarros híbridos electrónicos.
En el mercado negro, el costo de los dispositivos va de 500 a 5 mil pesos, pero los hay más caros. Es una industria millonaria.
A nivel mundial el mercado de los vapeadores alcanzó un valor de 15 mil millones de dólares, que equivalen a la mitad del presupuesto de salud en México para el 2022.
Se inventaron en 2004 en China como una medida para dejar de fumar. Casi 20 años después no hay evidencia científica que lo avale, pero sí que son un potencial causante de cáncer de pulmón y daño en otros órganos vitales.
“Muchas de las sustancias que les mencioné se excretan con la orina y entonces la vejiga, las paredes de la vejiga tienen contacto con todas estas sustancias que producen cáncer y entonces también se ha encontrado de manera muy importante cáncer de vejiga”, indicó Ponciano Rodríguez.
Además, los usuarios de vapeadores tienen el doble de riesgo de contagiarse de COVID y seis veces más posibilidades de contraer influenza.
Lamentablemente muchas veces lo ignoran, particularmente los menores como Tláloc, que a sus 15 años trata de dejar la adicción al vapeo.
“En los puestos, en las calles te los vendían sueltos, en los establecimientos te los vendían con caja, pero sólo venía la imagen del vapeador. ¿Ninguna etiqueta, nada? Yo nunca vi ninguna etiqueta” dijo el estudiante Tláloc.