Disfrazado de parto humanizado, que es el respeto por el proceso natural del nacimiento, Miwa Pierre fue violentada por el hombre que debería velar por ella y su bebé.
“Yo siempre creí que había tenido un parto natural, y cuando me entero, fui drogada sin mi consentimiento. Sigo teniendo problemas con la neurodivergencia de mi hijo y no sabré si fue por este medicamento”, compartió Miwa, víctima de violencia obstétrica.
A manos de quien se ostentaba como experto, la historia de Miwa se repitió al menos 14 veces más, “él lo hacía con dolo, cuando vas escuchando estas historias de varias mujeres si fue, pues mucho coraje y sí hay que tomar acciones”.
Presuntas irregularidades en clínicas
Miwa se agrupó en el colectivo “Con Ovarios”, fundado por Liora Anderman, otra víctima del presunto violentador, que incurrió en presuntas irregularidades en su clínica ginecológica, en la que programaba la inducción de partos sin justificación médica.
“Decido alzar la voz en las redes sociales y me empiezan a contactar un par de personas y ahí me entero que existen cinco mujeres que están unidas contra este médico”, comentó Liora Anderman.
Con asesoría legal el colectivo logró juntar evidencia de al menos 80 casos, “por supuesto que tienen documentos que avalan que se atendieron con este médico, pero además tienen su historia de por medio y todas se parecen muchísimo”.
En 2023 la Fiscalía de la Ciudad de México clausuró el consultorio de Jesús a quien Liora y Miwa reconocen como su violentador y a quien se le giró una orden de aprehensión por “práctica indebida del servicio médico en grado de tentativa”, sin embargo, Jesús se amparó.
“Se escapó a Estados Unidos y no ha avanzado nuestro proceso legal, estamos en esta espera y en esta espera es cuando el ICE de Estados Unidos lo detienen”, explicó Miwa Pierre.
El pasado 10 de octubre en California, Jesús fue detenido por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de Estados Unidos, país donde permanece. En tanto, las víctimas en México esperan su extradición.
“Con este caso queremos dejar un precedente judicial para que otros médicos cambien su forma de actuar porque si no logramos hacerlo, los médicos van a seguir delinquiendo”, finalizó Liora Anderman, víctima de violencia obstétrica.