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Walmart ofrece pagar 3.1 mmdd para resolver demandas por opioides

Imagen de pexels

El gigante minorista Walmart se convirtió este martes en el último actor importante de la industria farmacéutica en anunciar un plan para resolver las demandas presentadas por los gobiernos estatales y locales de Estados Unidos sobre el costo de los poderosos opioides recetados que se venden en sus farmacias.

La propuesta de 3.100 millones de dólares sigue a anuncios similares del pasado 2 de noviembre de las dos cadenas de farmacias más grandes de Estados Unidos., CVS Health y Walgreen Co., cada una de las cuales dijo que pagaría alrededor de 5 mil millones de dólares.

Walmart, con sede en Bentonville, Arkansas, dijo que “disputa enérgicamente” las acusaciones en las demandas de los gobiernos estatales y locales de que sus farmacias surtieron indebidamente las recetas de los poderosos analgésicos. Sin embargo, la empresa no admite responsabilidad con el plan de liquidación.

La fiscal general de Nueva York, Letitia James, indicó que la compañía tendría que cumplir con las medidas de supervisión, evitar recetas fraudulentas y señalar las sospechosas.

Los abogados que representan a los gobiernos locales dijeron que la compañía pagaría la mayor parte del acuerdo durante el próximo año.

Los acuerdos son producto de negociaciones con un grupo de fiscales generales estatales, pero no son definitivos.

Resolución de las demandas

Los acuerdos de CVS y Walgreens tendrían que ser aceptados primero por una masa crítica de gobiernos estatales y locales antes de que se completen.

Por lo que el plan de Walmart tendría que ser aprobado por 43 estados, pero el proceso formal aún no ha comenzado.

Las farmacias nacionales se unen a algunos de los mayores fabricantes y distribuidores de medicamentos para resolver demandas complejas sobre su supuesto papel en una epidemia de sobredosis de opioides que se ha relacionado con más de 500 mil muertes en Estados Unidos durante las últimas dos décadas.

El recuento de acuerdos propuestos y finalizados en los últimos años es de más de 50 mil millones y los gobiernos utilizarán la mayor parte para combatir la crisis.

En la década de 2000, la mayoría de las sobredosis fatales de opioides involucraron medicamentos recetados como OxyContin y oxicodona genérica.

Después de que los gobiernos, los médicos y las empresas tomaran medidas para dificultar su obtención, las personas adictas a las drogas recurrieron cada vez más a la heroína, que resultó ser más letal.

Aumentan las recetas de opioides

Las recetas de opioides aumentaron considerablemente en la década de 1990 cuando las empresas promovieron agresivamente los medicamentos, utilizados durante mucho tiempo, principalmente, en pacientes con cáncer, como una forma segura de tratar todo tipo de dolor crónico.

Las sobredosis de opioides, incluidas las píldoras recetadas y la heroína, aumentaron aún más durante la pandemia de COVID-19.

“Subieron 38% en 2020 con respecto al año anterior y otro 15% en 2021”, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos.

La agencia ha atribuido gran parte del aumento reciente en los casos de sobredosis al fentanilo fabricado ilegalmente, un poderoso opioide sintético.

Un informe del Congreso estadounidense el mes pasado, calculó el costo económico de la crisis de los opioides solo en 2020 en 1.5 billones.

Muertes por sobredosis de fentanilo aumentan en EUA

En Estados Unidos, las muertes por sobredosis de drogas aumentan sin control. En 2021, fallecieron 80 mil personas después consumir opioides sintéticos como el fentanilo, más de siete veces a lo registrado hace una década. 

Las personas jóvenes son las más afectadas, prueba de ello es que las cifras oficiales señalan que mil 146 adolescentes murieron en 2021 debido a una sobredosis de este opioide.

“Vemos que, en las redes sociales, la gente más joven, los adolescentes, están siendo envenenados. No tienen idea de lo que están tomando, ni idea. A menudo son los más jóvenes y los hemos visto desde los 12 años, los hemos visto, de todas las edades”, explicó el jefe de operaciones de la DEA, Ray Donovan. 

Tal es el caso de Makayla Cox, una estudiante de secundaria del estado de Virginia. Ella pensó que estaba tomando un medicamento para tratar dolores y ansiedad que su amiga le había conseguido, pero en realidad era fentanilo, un opioide sintético 50 veces más potente que la heroína. La mató casi de inmediato.  

Makayla parecía estar bien cuando se dirigía a su habitación. Su madre Shannon entró a su cuarto la mañana siguiente y la encontró parcialmente sentada, recostada contra la cabecera de la cama y con un fluido naranja saliendo de su nariz y boca. 

“Estaba tiesa. La sacudí, grité su nombre, llamé al 911. Mis vecinos vinieron y le hicimos RCP (reanimación cardiopulmonar), pero era demasiado tarde. Después de eso, no recuerdo mucho”contó Shannon Doyle, de 41 años.

La crisis de opiáceos en Estados Unidos ha alcanzado proporciones catastróficas. Las muertes van en aumento, con especial rapidez, entre los jóvenes, que obtienen drogas en redes sociales con recetas falsificadas. 

En 2019, 493 adolescentes murieron por sobredosis y  en 2021, la cifra fue de mil 146.

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