Con el inicio de la temporada de altas temperaturas, es importante reconocer las señales de alerta que indican que un menor está deshidratado, ya sea para tomar las acciones necesarias, o bien, para llevarlo al pediatra a valoración.
La deshidratación puede estar causada por una pérdida excesiva de líquido por vómito o diarrea, no beber suficientes líquidos, exposición a las altas temperaturas o cuando un recién nacido tiene problemas durante el periodo de lactancia materna.
Los bebés, los niños, los adultos mayores y los enfermos tienen mayor probabilidad de deshidratarse al padecer enfermedad diarreica.
Señales de alerta que indican que un menor está deshidratado
Síntomas de leves a moderados de la deshidratación:
- Juega menos de lo usual
- Orina con menos frecuencia (para bebés, menos de seis pañales mojados al día)
- Boca reseca
- Menos lágrimas al llorar
- Fontanela hundida en un bebé o niño pequeño
- Las heces son blandas si la deshidratación es causada por la diarrea; si la deshidratación se debe a la pérdida de líquidos (vómito, no consume líquidos) tendrá menos eliminación fecal.
Deshidratación grave (además de los síntomas y las señales ya indicados):
- Muy irritable
- Excesivamente somnoliento
- Ojos hundidos
- Manos y pies fríos y pálidos
- Piel arrugada
- Orina solo una o dos veces al día
Si se llega a presentar un cuadro de deshidratación en un menor, la Secretaría de Salud recomienda a padres y madres de familia que se mantengan alertas ante estas señales de advertencia, que indican que el niño o la niña requiere atención médica oportuna.
No siempre existe un indicador de la necesidad de agua del organismo, muchas niñas y niños no sienten sed hasta que están deshidratados. Por eso es importante aumentar la ingesta de agua simple cuando hace calor o están enfermos.
¿Cómo prevenir la deshidratación?
Cuando su hijo se enferme, dele más líquidos que de costumbre o solución de rehidratación oral. Dele pequeñas cantidades con frecuencia, sobre todo si está vomitando.
Los niños tienen que beber con frecuencia cuando hace calor. Aquellos niños que participen en deportes o actividades físicas intensas deben beber una cantidad de líquido adicional antes de iniciar la actividad y beber a intervalos regulares (aproximadamente cada 20 minutos) mientras lleven a cabo ese deporte o actividad física.