El cráter de un volcán inactivo en Xochimilco, aquí en Ciudad de México, se ha convertido en una cancha para que el balón ruede y los visitantes y lugareños disfruten de los partidos de futbol.
Se trata de una cancha de futbol única en el mundo. Cada domingo, el balón rueda en el cráter de un volcán inactivo de Xochimilco, en la Ciudad de México.
“Pues como hay mucha vegetación, ni se ve que es cráter, nada más es una joya, no se va el balón muy lejos”, comenta Adrián García, jugador de futbol.
Para llegar a la cima del volcán Teoca, a 2,600 metros de altura sobre el nivel del mar, se puede llegar a pie o en auto.
“Fantástico, para mí es muy impresionante venir, subir toda la trayectoria que tenemos que hacer para llegar al campo y tener un escenario muy bonito para el soccer, para hacer deporte”, menciona Daniel Mancilla, jugador de futbol.
Los equipos locales disputan un torneo sin importar el abrasador sol o la neblina que cubre todo. Aunque la cancha tiene poco pasto, los altos árboles que la rodean compensan esta característica y han visto jugar a chicos y grandes desde su fundación en 1950.
“Desde que yo era niño ya me traían cargando, pues le digo que me traían cargando porque subíamos caminando por la vereda”, relata Joel Becerril, representante de la liga local.