El Zócalo de la Ciudad de México se convirtió este fin de semana en un paraíso jurásico, donde pequeños y grandes pudieron disfrutar de una exposición que trajo de vuelta a los dinosaurios.
Gracias al Museo del Desierto, piezas fósiles y réplicas a escala invadieron la plancha principal de la capital.
La actividad forma parte del programa Zocalito de las Infancias, que enriqueció la experiencia de los asistentes con figuras como el Triceratops y el Tiranosaurio Rex.
“Soy fan de los dinosaurios, mi favorito es el Triceratops”, compartió emocionado Ibrahim Andrés Flores, uno de los visitantes.
Una experiencia educativa y familiar
Narciso Javier Medina, quien asistió con su hijo, señaló la importancia de “consentir a los pequeños y entrar en su mundo de fantasía”, mientras que Santiago Javier Medina Méndez expresó su alegría de compartir juegos de dinosaurios con su hermanito.
La muestra permitió entender que México fue, en la era mesozoica, un edén de biodiversidad. Arturo Homero González González, director del Museo del Desierto, explicó que el territorio mexicano desarrolló una extraordinaria vida prehistórica gracias a su posición geográfica entre dos océanos.
Entre los ejemplares destacados, mencionó al Labocania aguillonae, un pariente del Tiranosaurio Rex descubierto recientemente.
“Era una especie muy parecida al T-Rex, aunque pertenecía a un género distinto”, detalló.
Las actividades del Zocalito de las Infancias concluirán el próximo miércoles 30 de abril a las 18:00 horas.