Desde tempranas horas de la mañana, las avenidas principales de la capital se llenaron de participantes vestidos con atuendos vibrantes, ondeando banderas arcoíris y llevando pancartas con mensajes de amor y respeto.
Organizaciones civiles, colectivos, familias y aliados se unieron a la marcha, mostrando su apoyo incondicional a la comunidad LGBTIQ+.
A lo largo del recorrido, que inició en el Ángel de la Independencia, los asistentes disfrutaron de una serie de actividades y performances.
Además, diversos stands informativos ofrecieron recursos sobre salud, derechos humanos y servicios de apoyo para la comunidad.
Aunque la marcha es una celebración de la diversidad, también es una plataforma para alzar la voz sobre las problemáticas que aún enfrenta la comunidad LGBTIQ+.