Andrea Hernández, madre de Verónica Soto Hernández, quien fue víctima de feminicidio en 2019, acudió a la Rectoría de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) para solicitar el título profesional de enfermera de su hija.
“En distintas ocasiones y de varias formas he solicitado el título de mi hija y sólo me quieren dar un diploma”, externó Andrea desde la explanada de Rectoría en Ciudad Universitaria.
Andrea explicó que la solicitud responde a un acto de justicia y de memoria al esfuerzo de su hija, quien fue una alumna destacada de la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia (ENEO) -culminó sus créditos con un promedio de 9.6 y fue la tercer alumna con el promedio más alto de su generación-.
La madre de Vero contó, ante medios, que las autoridades universitarias ofrecen un diploma post mortem. Sin embargo, la entrega del título tiene un gran significado para Andrea y su familia.
“Para empezar porque me lo prometieron y porque mi hija se esforzó mucho. Nos esforzamos mucho. Y no es un papel para mí. Para mí es parte de la justicia que se merece mi hija”, sentenció la activista a Once Noticias Digital.
Cuando a Vero le arrebataron su vida tenía 22 años. Su madre la describe como una mujer comprometida y una estudiante responsable.
“Puedo decir con seguridad que donde se paraba ponía en alto a la ENEO”, dijo la madre que busca justicia.
Su madre reclama que cuando las autoridades universitarias se enteraron del feminicidio quisieron darle un apoyo económico; pero no respondía al llamado principal: que su caso tuviera acompañamiento jurídico, pronunciamiento de las autoridades universitarias y la entrega del título profesional de su hija.
Diploma post mortem
El Departamento Jurídico de la Facultad de Enfermaría y Obstetricia le informó a Andrea que se había hecho un diploma para Vero, en donde mencionaba su buen desempeño.
“Le pregunté qué había pasado con el título y me dijo que no era posible que me lo dieran, porque Verónica no había concluido el servicio social y no había realizado el trámite de titulación, a lo que respondí indignada, que ya estaba muerta, ¿cómo lo iba a hacer? Me dijo que lo podía recoger en control escolar en la FENO”, denunció la madre quien llevó la foto de su hija en mano.
Verónica Soto Hernández fue asesinada el 1 de noviembre de 2019 tras acudir a una fiesta por el “Día de Muertos”. Fue la última vez que su madre la vio con vida. Hasta ahora el proceso jurídico no ha tenido avances.