Bajo las ordenes de una enfermera, más de cinco policías en la unidad M61-BGD detuvieron al fotoperiodista Edgar Garrido Carrera por tomarle fotografías a la enfermera María Fernanda Sánchez Amador, de 19 años, quien lo denunció por sentirse acosada con las labores periodísticas; sin embargo, se ha mostrado la foto que el periodista realizó.
Durante su arresto el periodista pidió que le informaran por qué estaba siendo detenido pero en el video que circula en redes sociales todos los policías le dicen que no saben o solo lo ignoran.
Los derechos a la libertad de prensa y los derechos de una persona detenida fueron violados por funcionarios de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México y por elementos de la policía capitalina respectivamente.
La Secretaría de Salud no dio respuesta a las llamadas que Once Noticias hizo para saber su postura sobre la acusación de su trabajadora.
Mientras que la fiscalía capitalina abrió la carpeta con el numero UI-FDS-6-03/02880/12-2021 en contra del periodista. Sin embargo, tampoco dio respuesta a la petición de información que este medio le solicitó.
La alcaldía Benito Juárez emitió una tarjeta informativa en el que señalan que la trabajadora del Sector Salud del Gobierno de la CDMX refirió a los policías haberse sentido agredida por supuestas fotografías que le fueron tomadas por el fotógrafo, los elementos de Policía Bancaria Industrial (PBI) y de la Policía Auxiliar (PA) intentaron realizar la conciliación entre las partes en conflicto para llegar a una solución, pero la enfermera solicitó que el periodista fuera presentado ante la autoridad correspondiente.
La alcaldía Benito Juárez solicitará a la policía que se revisen los protocolos de actuación en la remisión del periodista y reiteraron su absoluto respeto al trabajo de los periodistas profesionales y por el cuidado de su integridad física.
Por su parte, la Fiscalía capitalina determinó dejar en libertad al periodista, ya que concluyó que no existió ningún delito que investigar.
En este caso vemos que debe haber más sensibilización del personal médico pero también a los elementos de seguridad, quienes tenían que ponderar el interés público del trabajo y explicar en ese momento porque el periodista no estaba cometiendo un delito y menos si está produciendo información que tiene que ver con los trabajos del personal de salud. Afortunadamente la FGJ bien reconoció que no hay delito, pero desafortunadamente Edgar Garrido tuvo que ser criminalizado y privado de su libertad por sus labores informativas”, dijo Juan Vázquez de Artículo 19, organización dedicada a la defensa de los periodistas.
El periodista pasó mas de ocho horas privado de su libertad por el abuso de autoridad del personal de salud y de la policía capitalina
La situación ya se resolvió. Con sinceridad la enfermera dio su relato al MP y desiste de su acusación, ya que el delito que señala no existió en ningún momento. Lamentablemente es un tema de ignorancia personal, ya que ella consideraba que tomar una foto a sus funciones en la vía pública es una situación de acoso que trasciende, y hace eco en la policía, lo que es tal vez aún peor, porque ellos debieran conocer nuestros derechos y función social como profesionales”. mencionó Garrido, el fotógrafo ganador del Pulitzer en el 2019.