Profesores miembros del movimiento de Universitarias y universitarios contra el porrismo y la represión, llamaron a las autoridades de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) a que accedan a un diálogo tras los hechos de violencia que se registraron el pasado 25 de julio, en Ciudad Universitaria.
El grupo de profesores se reunió en Rectoría, en el marco de una Asamblea que convocaron, a raíz del desalojo que perpetró personal de seguridad y protección civil de la UNAM contra estudiantes que mantenían la toma de las instalaciones de la Dirección General del CCH.
En entrevista, Mario Rojas, profesor del CCH Naucalpan, externó que han tenido algunas asambleas en línea en la que han participado activamente el cuerpo estudiantil, académicos y trabajadores. Sin embargo, denunció que las autoridades no han dialogado y por el contrario, han respondido de manera violenta en contra de los estudiantes.
“Nuestra posición es de condena, porque las autoridades siempre condenan enérgicamente la violencia de los estudiantes que se manifiestan para exigir sus derechos […] dicen que están dispuestos al diálogo, pero no hay diálogo, es una farsa”, sostuvo.
En tanto, el profesor de la Facultad de Derecho, Aulo Tulio Hernández, llamó a las autoridades universitarias para que resuelvan la disolución del porrismo en la UNAM.
Recordó que se trata de un problema que tiene sus raíces desde los sesenta y setenta, ya que esos grupos fueron creados bajo el auspicio de los gobiernos y de las autoridades universitarias, para mantener el control social a través de la violencia y el miedo.
Los hechos del 25 de julio
El pasado jueves, personal de Bomberos y de Protección Civil de la UNAM desalojaron a los estudiantes que mantenían, desde hace dos meses, una toma de las instalaciones de la Dirección General del CCH.
El argumento fue que había un supuesto incendio y un fuerte olor a gas. Sin embargo, en el desalojo hubo actos de violencia, por lo que el movimiento de Universitarias y universitarios contra el porrismo y la represión lanzó un pronunciamiento condenando los hechos.
“En el desalojo varias y varios estudiantes fueron agredidos, golpeados, intimidados y heridos (algunas y algunos de ellos menores de edad y uno de ellos en silla de ruedas), por quienes ingresaron a la fuerza a las instalaciones de la DGCCH, con el argumento poco creíble de que habían recibido una alerta de conato de incendio y de fuga de gas. Además, ni siquiera les permitieron retirar sus pertenencias. Es indignante que usen como pretexto un incendio para criminalizar y reprimir a jóvenes estudiantes”, se lee en su comunicado.
La toma que mantenían los estudiantes se dio en protesta tras la agresión de presuntos porros hacia estudiantes del CCH Naucalpan, el pasado 8 de mayo. Hay que recordar que un estudiante de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán murió a causa de esas agresiones.
Los estudiantes han denunciado que no ha existido un diálogo con las autoridades del Plantel Naucalpan y que sus peticiones -acabar con la violencia porril al interior de la Universidad- no han sido resueltas.
Asimismo han denunciado que Benjamín Barajas, titular de la DGCCH, tampoco los ha atendido, menos aún, el rector, Leonardo Lomelí.