“Justicia” es la palabra para describir la liberación de María Isabel San Agustín, mujer indígena que fue torturada y pasó 10 años en prisión por el delito de secuestro. Siendo inocente.
Su caso, apenas es la punta del iceberg de cientos de presos encarcelados en condiciones similares.
Lo que tenemos de estos casi 400, es que 49 teníamos acreditados en recomendación que estaban, habían sido sujetos de tortura y que por el tipo de investigación se había recomendado que se reiniciara la investigación, por lo tanto, en esos teníamos asegurados completamente que la tortura había sido un elemento fundamental para que ellos estuvieran privados de su libertad”, Nashieli Ramírez, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la CDMX.
De estos 49 casos, nueve son mujeres. Este primer caso es sumamente emblemático porque la justicia se mira como un derecho, y no como un privilegio”, Ingrid Gómez, secretaria de mujeres, CDMX.
Desde robo hasta narcotráfico, son los delitos por los que personas en condiciones de vulnerabilidad, en su mayoría, son víctimas de irregularidades en procesos judiciales.
Son variados, desde delitos de alto impacto que se llaman, puede ser secuestro y este tipo de casualidad al narcotráfico, hasta tenemos sujetos de tortura que tienen delitos imputados del fuero común”, agregó Nashieli.
Toda la cantidad de procedimientos que se van interponiendo, a veces por las propias defensas o asesores jurídicos privados que contratan las víctimas, pero creo que es necesario tener como, sí una mirada integral, perspectiva de género y de derechos humanos, pero también viendo la especificidad de cada caso”, dijo Ingrid.
Hace unos días el presidente López Obrador anunció una iniciativa para que sean liberadas aproximadamente 94 mil presos sin sentencia por delitos no graves.
Vale decir que los reclusos que obtendrían su libertad serán solo aquellos detenidos por más de 10 años sin sentencia; adultos mayores de más de 75 años, que no hayan cometidos delitos graves; adultos mayores de 65 años con alguna enfermedad crónica y que no hayan cometidos delitos graves y presos que hayan sufrido algún tipo de tortura de acuerdo con el protocolo de Estambul.
En la Ciudad de México, las autoridades ya revisan cada uno de los casos con estas características, para que más personas puedan recuperar su libertad, como María Isabel.
Estamos viendo todas las posibilidades tanto de un decreto emitido por mi persona en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México o el trabajo que está haciendo la Fiscalía como en este caso, que puede haber desistimiento, dadas las condiciones”, Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México.