Los gobiernos de Canadá y China reaccionaron al anuncio de la política arancelaria que impondrá el presidente electo de EUA y coincidieron que una guerra comercial no conviene a nadie.
Los gobiernos de Canadá y China reaccionaron al anuncio de la política arancelaria que impondrá el presidente electo de EUA y coincidieron que una guerra comercial no conviene a nadie.