Luego de que la jefa de Gobierno de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, anunció que la estatua de Cristóbal Colón ya no regresará a Paseo de la Reforma y que en su lugar se colocará la de una mujer olmeca en honor a los pueblos originarios, este jueves se revelaron más detalles sobre el monumento.
Se llamará “Tlalli”, que en náhuatl significa “tierra”. Fue el escultor Pedro Reyes, encargado de la obra, quien compartió una serie de imágenes a través de su cuenta de Instagram.
La idea de este monumento es una alegoría a la tierra que está inspirada en muchos elementos de la escultura mexicana desde diferentes momentos de la historia, desde su gran antigüedad, sobre todo evidentemente las cabezas olmecas, que son la expresión más antigua de la escultura en México”.
El artista originario de Ciudad de México, recordó que todas las representaciones de las cabezas olmecas son masculinas, por lo que representó un reto cambiar el género.
Los rasgos que sí conserve de la escultura olmeca, en primer lugar son los ojos, son felinos, es el ojo jaguar, también los labios, que tanto se le ha asociado al jugar, en realidad uno ve dos serpientes encontradas, que representan el origen del cosmos y dos serpientes también las vamos a encontrar en el tocado del pelo”.
“Originalmente había pensado en el pelo recogido como si fuera una especie de chongo. Consultando con antropólogos me hicieron la observación que en el mundo prehispánico en realidad se hacían unas trenzas y que esas trenzas se manifiestan como dos cornezuelos”, añadió.