El comercio electrónico ha facilitado la compra-venta de productos y servicios, sin embargo, también ha fomentado los envíos de medicamentos falsificados, advirtió Todd Reves, director de la División de Fomento de la Propiedad Intelectual en la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI).
Durante su participación en la Semana de la Innovación, Tecnologías Transformando la Salud organizada por la Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica, A. C. (AMIIF), Reves advirtió que hoy en día se realizan demasiados envíos de medicamentos falsos por paquetería express, tras su adquisición en línea.
Hoy muchos productos falsificados están mandados en pequeños empaques por servicios postales y paquetería express, esto empujado por el comercio electrónico que es más fácil enviar bienes. Eso hace que sea más difícil detectar el comercio ilegal. El comercio electrónico les da un punto fácil de entrada.
“Por ejemplo, durante la pandemia se crearon dominios para comercializar fármacos falsificados, al menos se crearon 100 mil nuevos nombres para dominios en internet que tenían ventas de elementos médicos”, dijo Todd Reves.
El experto en Propiedad Intelectual comentó que el tráfico de productos no originales es un problema para los gobiernos, participantes de la industria, y público en general.
Advirtió que la ruptura de Propiedad Intelectual para medicamentos es atractivo para los comerciantes ilegales porque hay un nivel menor de detección y pueden engañar a las personas. Sumado a ello, dijo Revés, no hay interés para rastrear a quienes repiten sus compras sin importar las consecuencias de salud.
El especialista en protección de la propiedad intelectual dijo que de acuerdo con un reporte de la Organización Mundial de la Salud (OMS), a nivel mundial cada año pueden morir entre 72 mil y 169 mil niños por neumonía después de recibir fármacos falsificados.
Todd Reves dijo que desde la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (WIPO por sus siglas en inglés) trabajan en el desarrollo y adopción de nuevas tecnologías como blockchain y sistemas de rastreo que permiten la autenticación de medicamentos para prevenir su falsificación.
Aseguró que cada vez más compañías farmacéuticas usan blockchain y serialización, firmas digitales para seguridad y proteger a los consumidores, lo que incrementa la transparencia y promueve los productos farmacéuticos auténticos.