Al menos 95 personas han fallecido debido a las severas lluvias e inundaciones que se han registrado en España, principalmente la región española de Valencia. Esta situación sembró caos en muchos pueblos que quedaron aislados y a los que los servicios de emergencias están intentando acceder para rescatar a más personas.
Esta cifra aumentará porque todavía hay “muchos desaparecidos”, advirtió el gobierno de este país.
“La cifra actualizada es de 92 personas fallecidas en la Comunidad Valenciana, dos en Castilla La Mancha y una persona más en Andalucía, lo que hace un total de 95 personas”, indicó el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres.
Asimismo, Torres advirtió que estos datos son provisionales “porque lamentablemente todo hace prever que esta cifra va a aumentar”.
La situación en Valencia es crítica y se ha complicado el ingreso de los servicios de emergencia, pues hay carreteras derrumbadas y zonas aisladas, sin telefonía ni electricidad, lo que hace temer sobre un aumento en el número de víctimas. Cabe destacar que el transporte ferroviario y aéreo hacia la zona continúa suspendido.
Por su parte, el presidente de España, Pedro Sánchez, quien visitará la zona afectada el jueves, instó a las y los ciudadanos a no bajar la guardia en momentos en que la emergencia continúa.
“Vamos a poner todos los medios necesarios hoy, mañana y el tiempo que haga falta para que podamos recuperarnos de esta tragedia, no los vamos a dejar solos”, dijo el mandatario socialista desde el Palacio de la Moncloa.
Ante esta situación, el gobierno español decretó tres días de luto oficial a partir del 31 de octubre.
Mientras que el rey Felipe VI expresó su “tristeza por tantas pérdidas de vidas humanas”, en un mensaje desde las islas Canarias.
“Ha habido un enorme destrozo de infraestructuras y bienes materiales de muchísimas personas. No hay todavía información completa del impacto, del alcance, de los efectos, incluso de las posibles víctimas”, declaró.
Emergencia continúa
Las impactantes imágenes de la noche del 29 de octubre mostraron calles convertidas en verdaderos ríos caudalosos que arrastraban todo a su paso, incluidos los vehículos.
La agencia estatal de meteorología Aemet registró acumulaciones extraordinarias de lluvia, con algunos municipios recibiendo 300 litros de agua por metro cuadrado en apenas unas horas, es decir, prácticamente lo que puede llover en un año completo.
Esta catástrofe ha sido considerada como la más mortífera que se haya registrado en España desde agosto de 1996, cuando murieron 86 personas por lluvias torrenciales en la provincia de Huesca.
En suma, Aemet advirtió que las lluvias continuarán al menos hasta el jueves, aunque se irán desplazando hacia el noreste, a la región de Cataluña.