No cabe duda que la miel es excelente para mejorar los síntomas del resfriado común. Al consumirla se mejora el tracto respiratorio-digestivo, logrando un gran alivio sintomático.
Aunque parece un tema muy explorado, en realidad apenas hace un poco más de un decenio no se hacía un estudio médico concerniente a las virtudes de la miel.
- Mucho más eficaz que los antibióticos
El antibiótico no ha terminado de frenar a los virus que detonan la irritación gripal. En realidad, solo colaboran para que otras bacterias y microorganismos no compliquen el cuadro de enfermedad.
Por su parte, la miel tiene una virtud: limpia el tracto de la faringe. Las gripes congestionan con mucosidad e inflamación esta zona, y este alimento arrastra, gracias a su densidad, todas secreciones. Es así como la persona siente un gran alivio y descongestión inmediata.
- La miel, múltiples bondades
De acuerdo con estudios de la Universidad de Oxford, se encuentran las siguiengtes:
- No es un mero placebo.
- Cubre y protege mucosas afectadas por la tos.
- Contiene enzimas y proteínas que contrarrestan a las bacterias.
- No tiene ningún efecto secundario o dañino.
- Es completamente natural, a diferencia de los antibióticos elaborados en laboratorios.
- Reduce los síntomas de la tos en un 36%.
- Minimiza la gravedad de un cuadro gripal hasta un 44%.
- No pierde efectividad. Los microorganismos crean resistencia a los antibióticos, nunca a la miel.
- Su sabor dulce obsequia a los pacientes un alivio en el paladar.
- Se puede consumir de varias maneras: con una cucharada, disuelta en tisanas, etc.
- Es mucho más económica que los costosos medicamentos.