En Estados Unidos, el ala este de la Casa Blanca fue demolida 83 años después de su construcción y de importantes sucesos históricos, sólo por una remodelación impuesta por el presidente Donald Trump, que quiere construir un salón de baile.
El proyecto, que se saltó todas las consultas legales, no debía interferir con el monumento histórico existente, pero desde hace días hay máquinas destruyendo la fachada del edificio.
La obra costará más de 250 mdd
La construcción del salón de baile costará más de 250 millones de dólares, una cifra que dijo Trump, será pagada por él y sus donantes. En una superficie de ocho mil metros cuadrados, tendrá espacio para novecientas personas.
En una imagen creada por inteligencia artificial, se observa el lujo que tendrá el salón de baile, con paredes de oro, candelabros con diamantes y piso de mármol.
Las imágenes de excavadoras demoliendo partes de la Casa Blanca se hicieron virales a principios de esta semana.
“Me complace anunciar que se ha iniciado la construcción del nuevo, magnífico y hermoso Salón de Banquetes en los terrenos de la Casa Blanca”, escribió Trump en una publicación en su red social Truth.
El presidente enfatizó que no se está utilizando ni un centavo del dinero de los contribuyentes para la renovación. Esto hace posible que las obras se lleven a cabo durante el cierre que ha paralizado al Gobierno estadounidense durante unas tres semanas y ha detenido la mayor parte del gasto público.