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Pulpo maya reciente el calentamiento de océanos: UNAM

Especialistas de la UNAM están investigando la sensibilidad térmica de los pulpos; han encontrado que estos animales están buscando aguas más profundas.

Los efectos que está provocando el calentamiento global, principalmente en los océanos, está afectando a la fauna, alertó Carlos Rosas Vázquez, académico de la Facultad de Ciencias (FC) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

El foco del estudio que está realizando el titular del Laboratorio de Ecofisiología Aplicada, es sobre la sensibilidad térmica del pulpo maya, que habita en la Península de Yucatán, para el cual trabajan en modelos respecto a la distribución y su abundancia en esa entidad ante el calentamiento global.

El experto indicó que la plataforma continental donde se desarrolla esta especie es bañada por una corriente de agua fría proveniente del Caribe, desde una profundidad de 300 a 400 metros. Esto hace que las temperaturas fluctúen entre los 22 y 23 grados durante el verano, lo que ha generado condiciones oceanográficas favorables para el pulpo maya.

Pero este ambiente está cambiando con el calentamiento de los océanos. El especialista señala que, desde 2024, han registrado ondas de calor importantes. Se ha observado que la pesca de pulpos ha disminuido. Por ejemplo, en Campeche, donde la corriente fría no llega.

“Los pescadores lo atribuyen a la sobrepesca y otros efectos, yo insisto que es la temperatura, de más de 30 grados. Los pulpos no las toleran, sus límites están por los 27 grados. Aquí, frente a Sisal, todavía tenemos la influencia de esta surgencia, que hace que el agua se enfríe un poco, estamos monitoreando la temperatura –casi 18 kilómetros– y está entre 29 y 31 grados y no hay casi pulpos”, alertó Carlos Rosas Vázquez.

El académico de la UNAM subrayó que, si esta especie se mueve a aguas más profundas, tendrá que buscar si hay alimento.

Detalló que la mayoría de los animales acuáticos que no pueden regular su temperatura corporal dependen del medio para sus actividades. La reproducción es un proceso importante y sensible.

“En el caso del pulpo, las hembras desovan una sola vez en la vida, esa apuesta es todo o nada. Nos interesó explorar su sensibilidad térmica y encontramos que son muy sensibles a las altas temperaturas”, comentó el investigador.

Además, habría un efecto económico importante para los pescadores ribereños, quienes solamente pueden recorrer una pequeña franja de la Península, 15 o 20 kilómetros.

México es el segundo país exportador de pulpos en el mundo. Se calcula que su producción pesquera es de 20 mil a 30 mil toneladas al año, sólo en la Península de Yucatán. 

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