La otra cara del Gran Premio de México
Se desató la checomanía en las inmediaciones del Autódromo de los Hermanos Rodríguez
Se desató la checomanía en las inmediaciones del Autódromo de los Hermanos Rodríguez.
Siempre he sido apasionado de los autos, autos deportivos y carreras de fórmula, Fórmula E y Fórmula 1, venimos con todo ahorita a apoyar a ‘Checo’ Pérez”, comentó un asistente.
Hace rato me lo encontré. -¿Qué le dijo? -Que me mandaba saludar y yo que le digo adiós Chequito, gana, eres el campeón de México, tenemos toda la esperanza en ti y arriba Checo”, mencionó otro asistente.
Cientos de aficionados portaban las playeras y gorras con el número 11 de la escudería Red Bull.
Dos horas antes del inicio de la carrera, ya los fanáticos vaticinaban que el piloto tapatío haría historia en México y subiría al podio.
Una emoción muy fuerte, ahora sí se va a coronar aquí en México, ya se coronó en otros países y le toca hoy en México. Checo, Checo, Checo”, dijo un asistente.
No importó el intenso calor o que no se consiguiera el tan preciado boleto para ingresar a las gradas del Autódromo.
Decenas de fanáticos al automovilismo se conformaron con ver pasar los bólidos, aunque sea por unos segundos en cada vuelta, desde un lugar no tan privilegiado.
En ese mismo puente, María Eugenia celebró los 15 años de su hijo de manera muy especial, y le dio un regalo que no olvidará.
Hoy es un día muy especial para él, porque él está cumpliendo 15 años y hubiera sido el regalo perfecto, pero no se dio, ya será para el próximo año. Pero al menos ya lo vestí de Fórmula 1”, indicó Eugenia, aficionada al automovilismo.
Antes no me gustaban, pero cuando conocí a Checo Pérez me empezaron a gustar. Lo conocí por anuncios de la tele”, señaló Edgar, aficionado.
Mario, vino desde Tijuana con la ilusión de ver las carreras, pero se topó con los revendedores, que a la vista de policías capitalinos, le dieron un boleto falso en 8 mil pesos.
Lo escanearon y me dijeron que no. Lo qué pasa es que vengo de Tijuana y dije voy a ver, aprovechando que estaba aquí y dije voy aquí”, dijo Mario, aficionado.
Quienes intentaron conseguir boletos de última hora, comentaron que los revendedores pedían hasta 20 mil pesos por una anhelada entrada al Autódromo de Ciudad de México.