Otros lugares quedan reservados únicamente para las personas que poseen una “tarjeta verde”, que significa que han recibido la segunda dosis de la vacuna desde hace al menos una semana, o que se han recuperado de la enfermedad.
- Tom John, de unos 30 años, se conectó a la aplicación de su gimnasio e inscribió su “tarjeta verde”, un certificado en línea del ministerio de Salud que prueba en su caso que ha recibido la segunda dosis de la vacuna Pfizer/BioNTech, según explica.
Se cliquea aquí para descargar el certificado de la tarjeta verde”, muestra el joven, que retoma el entrenamiento en el gimnasio tras varios meses de interrupción.
Ora Davidovicz, de 90 años, apenas controla su impaciencia ante la puerta del gimnasio con piscina, ubicado en pleno corazón de Tel-Aviv.
Hace casi un año que no he ido a la piscina, estoy impaciente, contaba los días pues adoro nadar”, dice la mujer.
He traído mi certificado, que muestra que he sido vacunada. Ahora solo me falta ponerme el bañador y ¡a nadar!”
En una de las campañas de vacunación contra el coronavirus más rápidas del mundo, en Israel más de 4,3 millones de personas, 48% de los 9 millones que viven en el país, han sido vacunadas con al menos una dosis de la vacuna de Pfizer/BioNTech desde diciembre, y unas 2,9 millones de personas recibieron ya la segunda dosis.
- Recientes estudios israelíes cifraron en 95% la eficacia de la vacuna una semana después de la segunda dosis y en un 85% entre dos y cuatro semanas después de la primera dosis.
Con ropa deportiva y camiseta negra, el primer ministro Benjamin Netanyahu acudió el sábado por la noche a un gimnasio de Petah Tikva, cerca de Tel-Aviv, e invitó a los millones de israelíes poseedores de una “tarjeta verde” a acudir a los lugares abiertos para las personas vacunadas.
Cualquier persona con esta tarjeta verde puede ir a los gimnasios, los cines y próximamente a los restaurantes y los aviones” declaró, instando a los israelíes a vacunarse.
- Según cifras oficiales, en Israel más de 747 mil personas se contagiaron de coronavirus de las cuales unas 5 mil 600 murieron desde el inicio de la pandemia.