Los militares golpistas guineanos, que el domingo derrocaron al presidente Alpha Condé, se comprometieron a acelerar la liberación de los opositores detenidos por el antiguo Gobierno, una decisión muy esperada por sus partidarios.
Éstos, volvieron a insistir en sus comunicados por televisión o en redes sociales sobre una próxima consulta a nivel nacional para definir las modalidades de la transición política en este país del África Occidental, uno de los más pobres del mundo a pesar de ser un importante productor de minerales, bauxita en particular.
La transición será liderada por un futuro Gobierno de unidad nacional”, dijo el líder del Comité Nacional de Unidad y Desarrollo (CNRD), teniente coronel Mamady Dumbuya.
El militar además instruyó al Ministerio de Justicia para que contacte con la Fiscalía General, administración penitenciaria y abogados para analizar en profundidad los expedientes de los detenidos políticos para su liberación lo antes posible.
El Frente Nacional de Defensa de la Constitución (FNDC), integrado por movimientos políticos y sociedad civil, que lideró la protesta contra el polémico tercer mandato de Condé, había instado a los habitantes de Conakry a acoger a sus miembros que supuestamente serían liberados a partir del lunes al mediodía.
Pero, pese a una concentración cerca de la cárcel central, aún no hubo liberaciones.
Los militares impusieron un toque de queda y cerraron las fronteras, que reabrieron este lunes.
El epílogo aparente de más de una década del régimen de Alpha Condé ha provocado una amplia condena internacional.
La Unión Africana (UA) pidió este lunes su liberación inmediata y regresar al orden constitucional.