El grupo chií libanés Hezbolá anunció este domingo que el comandante Ali Karaki falleció el viernes en el mismo bombardeo israelí que mató al máximo líder del movimiento, Hasán Nasrala, en Dahye, Beirut.
Según Israel, en el ataque murieron al menos 20 altos mandos “terroristas” de Hezbolá.
El ejército israelí indicó que “más de otros 20 terroristas” de Hezbolá también perdieron la vida en el bombardeo, el cual tuvo como objetivo el cuartel general subterráneo del grupo en la periferia sur de Beirut.
Este cuartel se encontraba bajo edificios civiles y, según el comunicado israelí, los combatientes dirigían desde allí las operaciones terroristas de Hezbolá contra el Estado de Israel.
Karaki, quien comandaba las operaciones del grupo en el sur del Líbano desde 1982, fue el “responsable directo” durante los enfrentamientos fronterizos iniciados el pasado 8 de octubre, un día después del estallido de la guerra con Gaza.
Hezbolá confirmó el sábado la muerte de su carismático líder, Hasán Nasrala, en el bombardeo israelí, que fue descrito como de una intensidad inédita contra los suburbios del sur de Beirut, bastión del grupo armado.
En la misma operación, denominada “Nuevo orden” por Israel, fallecieron varios dirigentes de Hezbolá junto a Nasrala.
Abbas Nilforushan también perdió la vida
Por su parte, la Guardia Revolucionaria Iraní confirmó que el subcomandante de operaciones de su fuerza militar, el general de brigada Abbas Nilforushan, también perdió la vida en el ataque. Nilforushan se había unido a sus camaradas en la región el 27 de septiembre para combatir contra el “régimen sionista”, según la declaración oficial.
El ejército israelí añadió que la “mayoría” de los altos cargos de Hezbolá han muerto en operaciones llevadas a cabo por Israel en los últimos meses.
También fue abatido Nabil Qaouk
Además, señaló que en otro bombardeo realizado el sábado en los suburbios de Dahye, al sur de Beirut, también fue abatido Nabil Qaouk, comandante de la unidad de seguridad preventiva de Hezbolá.