El ministro de Defensa de Malasia, Ismail Sabri Yaakob, informó este lunes de la detención de mil 111 personas durante el domingo por violar el confinamiento y algunas de las otras restricciones impuestas para detener el avance del coronavirus, que ha dejado hasta el momento casi 666 mil 500 casos y cerca de mil muertos.
Un tercio de las personas que han sido arrestadas lo han sido por intentar cruzar las fronteras dentro del territorio malasio o contravenir alguna de las otras normas impuestas por la crisis sanitaria, como no utilizar mascarillas o no acatar las reglas de distanciamiento social.
Entre los infractores de los últimos días también está el ministro de Territorios, Annuar Musa, a quien se acusa de haberse saltado algunas de estas normas.
Un oficial de Kuala Lumpur ha sido también detenido por un presunto delito de acoso sexual durante el confinamiento.
Si bien las detenciones diarias suelen contarse por centenares, los más de mil 100 arrestados de este domingo es la cifra más alta desde que se decretaron las normas para hacer frente al coronavirus.
La mayoría de los casos se resuelven con el pago de una sanción.
El Gobierno de Malasia declaró nuevamente el estado de emergencia y anunció un segundo confinamiento a mediados de enero, tras el repunte de casos y fallecidos en diciembre.
Los últimos datos del Ministerio de Salud cifran en 975 los muertos por coronavirus y en 266 mil 445 los positivos, de los cuales cerca de 220 mil corresponden a altas médicas.
Este lunes se han registrado 2 mil 200 nuevos casos, la cantidad más baja desde el pasado 2 de enero.
Está previsto, tal y como avanzó la semana pasada el ministro de Ciencia, Khairy Jamaluddin, que el primer ministro de Malasia, Muhyuddin Yassin, anuncie este martes el inicio del programa de vacunación, recibiendo él mismo la primera dosis, al tratarse de población de riesgo, ya que además de contar con 73 años ha estado enfermo de cáncer.