Un flechazo, una foto y el inicio de una nueva vida, o al menos el intento de tener una una vida “normal’’.
Miles de refugiados que escaparon de la invasión rusa y que huyeron a Polonia buscan entrar a la escuela o encontrar un trabajo.
A casi mes y medio de iniciada la guerra, la vida como refugiado es un eterno impasse.
Algo que Solomia no se puede permitir, huyó de lviv, y su hijo, Marko, de solo tres meses de edad, necesita atención médica para aplicarle las vacunas que le corresponden.
“Queremos volver después de la guerra. volveremos a ucrania. pero por ahora necesitamos construir una vida más o menos normal’’, aseguró Solomia.
En el Estadio Nacional de Varsovia, las autoridades instalaron un centro donde los desplazados hacen fila para obtener el pesel, un número de identificación que les permitirá acceder a servicios médicos; emplearse en las vacantes disponibles o en el caso de los niños, asistir a la escuela.
“Ayudo a las personas a obtener los documentos necesarios para garantizar que tengan todo en Varsovia’’, comentó Karolyne.
De acuerdo con el Ministerio del Interior de Polonia, hasta la fecha, se han entregado 650 mil números de identificación, 50% a niños y niñas, 40% a mujeres y 10% a hombres, la mayoría de 60 años.
“Lo hacemos porque llegamos con el pasaporte ucraniano y necesitamos un documento que compruebe que estamos aquí legalmente. es parte de intentar comenzar desde abajo’’, comentó Solomiia.
“Es importante para mi familia para que los niños entren a la escuela o para obtener algunos beneficios, porque muchas organizaciones te piden aquí el número pesel’’, dijo Dimtry.
Cuando inició la guerra, Dimytri no se encontraba en casa.
“Estaba trabajando en Brasil. vine a Polonia, porque Polonia está muy cerca de ucrania y mi plan era sacar a mi familia del país, y ahora estoy aquí junto con mi esposa y mi hijo’’, señaló.
Ahora, se registra como refugiado y poder recibir al nuevo integrante de la familia: Oleksander.
“Está planeado para el 7 de mayo, muy pronto, en los próximos días’’, puntualizó Dimtry.
En medio de la tragedia, Oleksander y Marko son una buena razón para iniciar una nueva vida, aunque se esté lejos de casa.