En Ecuador, nueve mil militares y policías tomaron el control de las calles de las tres provincias más acosadas por el narcotráfico, que han dejado más de mil muertos solo en lo que va del año.
El operativo forma parte del estado de excepción por 60 días que decretó el presidente, Guillermo Lasso, el fin de semana.
Aunque no hay un balance global, pero las autoridades ya reportan detenciones y decomiso de armas y drogas.
La fuerza pública incursionó en convulsas y deprimidas zonas, donde el acceso era difícil para los agentes.