La Organización de las Naciones Unidas (ONU) pidió una investigación independiente y mencionó posibles crímenes de guerra por los numerosos civiles que habrían muerto en la región de Tigré en Etiopía, donde el gobierno federal lanzó una operación militar.
A pesar de que los detalles de la masacre informada por Amnistía Internacional en Mai-Kadra en el sudoeste de Tigré no hayan sido aún suficientemente verificados, la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, pide una investigación completa”, indicó su oficina.
Si se confirma que fueron deliberadamente perpetrados por una de las partes en los combates, estos asesinatos de civiles equivaldrían desde luego a crímenes de guerra, y debe haber una investigación independiente y una rendición de cuentas sobre lo ocurrido”, agregó.
Amnistía Internacional denunció el jueves que numerosos civiles murieron durante una “masacre” perpetrada según testigos por la guerrilla en la región etíope de Tigré, donde una operación del ejército obligó a más de 11 mil personas a refugiarse en Sudán.
Es la primera vez que se informa de un gran número de muertos civiles desde el inicio el 4 de noviembre de este conflicto que enfrenta al gobierno etíope del primer ministro Abiy Ahmed y al Frente de Liberación de los Pueblos del Tigré (TPLF), el partido en el poder en esta región secesionista del norte del país.
Amnistía dijo que no disponía de la información suficiente para identificar a los autores de la masacre, pero habló con testigos que los atribuían a la guerrilla del TPLF.