De acuerdo a la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) el panda gigante alluropoda melanoleuca, anteriormente en peligro pasó ahora a la categoría de vulnerable, debido a que la población ha crecido gracias a eficaces programas de protección de los bosques y de reforestación.
- Dijo que esta mejora confirma la eficacia de la acción del gobierno chino para proteger la especie.
Sin embargo, se prevé que el cambio climático podría eliminar, en los próximos 80 años, más del 35% de los bosques de bambú que constituyen el hábitat del panda.
Por consiguiente, prevé una reducción de la población anulando así los logros de los últimos 20 años.
Por ello, indicó que para proteger a esta especie emblemática resulta crucial mantener las medidas eficaces de protección de los bosques y responder a las nuevas amenazas.
El plan del agobiemos chino, señaló, encaminado a ampliar la política de conservación de esta especie es un avance positivo, debe ser objeto de un fuerte apoyo para garantizar su aplicación efectiva.
El panda gigante es un insaciable devorador de bambú. Un ejemplar medio se pasa la mitad del día comiendo literalmente 12 de cada 24 horas y hace sus necesidades docenas de veces al día. Hacen falta 12.5 kilos de bambú para cubrir las necesidades alimenticias diarias de un panda gigante. Los pequeños pesan apenas unos 150 gramos al nacer y no pueden gatear hasta cumplidos los tres meses. Nacen ciegos y de color totalmente blanco, sólo más tarde su pelo toma las tonalidades que lo hacen tan atractivo”, indicó la UICN.
Los osos panda sólo se encuentran en estado salvaje en remotas regiones montañosas del centro de China.
Allí, las elevadas plantaciones de bambú son frescas y húmedas, como a ellos les gusta.
En verano, pueden ascender hasta los 4 mil metros de altitud para buscar su alimento en las laderas más altas.
