El papa francisco lamentó el “viento glacial de la guerra” procedente de “Europa del este”, y pidió a líderes mundiales no permanecer indiferentes ante la emergencia migratoria.
Durante un discurso en el palacio presidencial de la Valeta, en Malta, al iniciar una visita de dos días por la Isla del Mediterráneo, el pontífice se refirió, sin indicar su nombre, a la intervención que encabeza el presidente Vladimir Putin en Ucrania.
Una vez más, algún potentado, tristemente atrapado en reclamos anacrónicos de intereses nacionalistas, está provocando y fomentando conflictos, mientras que la gente común siente la necesidad de construir un futuro que, o será compartido, o no será en absoluto”, papa Francisco
Ante el presidente maltés, George Vella, y el cuerpo diplomático, el pontífice se refirió a los más de 4.1 millones de ucranianos que han huido de su nación y pidió “respuestas amplias y compartidas” ante la “emergencia migratoria, ya que no pueden cargar con todo el problema sólo algunos países, mientras otros permanecen indiferentes.
Agregó que, aunque se pensaba que las invasiones, los combates callejeros salvajes y las amenazas atómicas eran sombríos recuerdos de un pasado lejano, el conflicto en Ucrania ha demostrado lo contrario.
Además, denunció “las seducciones de la autocracia” y “los nuevos imperialismos” que traen el riesgo de “guerra fría ampliada que puede sofocar la vida de pueblos y generaciones enteras”.
Reconoció que está sobre la mesa una visita a ucrania, por invitación del presidente Volodímir Zelenski.