Este lunes, en Perú, las provincias de Canchis y Espinar, en el departamento de Cusco, reiniciaron las protestas contra el Gobierno, mientras que en Lima se espera una nueva jornada de rechazos.
En Canchis, el Puente Arturo amaneció cubierto con montículos de tierra y piedras. Los manifestantes cerraron el paso hacia Puno y Arequipa, de acuerdo con reportes de la prensa local.
Así, el Comité de Lucha Provincial de Espinar Cusco y sus diferentes organizaciones sociales decidieron retomar la huelga contra el régimen de la presidenta designada Dina Boluarte.
Además, dirigentes de los Frentes de Organizaciones Populares de Puno declararon enemiga del pueblo a la jefa del Ejecutivo, tras el asesinato de 21 peruanos en la zona y reiteraron su exigencia a dimitir.
La semana pasada, desde Puno se reportó el incendio de la Comisaría de Juli, tras la violenta represión de los miembros del ejército contra pobladores. Hasta el momento, reportan cinco personas heridas. Esa región altiplánica, fronteriza con Bolivia, cumple una huelga prolongada hace un mes.
#PulsoRegionalCusco: Canchis y Espinar reinician protestas contra Dina Boluarte está madrugada. La Convención evalúa hoy cómo se unirá a manifestaciones.
— DerechosHumanosSinFronteras (@dhsfcusco) March 6, 2023
En Canchis, el puente Arturo amaneció cubierto con montículos de tierra y piedras. No hay paso de Cusco a Puno y Arequipa pic.twitter.com/vBBiz5tJkq
ONU, preocupada por la situación en Perú
Por otra parte, desde Ginebra, Suiza, un grupo de expertos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) pidió el fin de la violencia en Perú y expresó su preocupación por las denuncias de represión, asesinatos arbitrarios, arrestos y detenciones en el país e instó a las autoridades peruanas a establecer un diálogo genuino con el pueblo.
En cualquier sociedad democrática la gente tiene derecho a protestar y plantear sus preocupaciones sobre los cambios políticos que afectan a sus vidas y medios de subsistencia” dijeron los analistas.
En ese sentido, llamaron a tomar en cuenta las aspiraciones de los manifestantes en cualquier diálogo que se establezca.
Asimismo, el grupo de la ONU resaltó el último informe de la Defensoría del Pueblo peruana, el cual cifró en 48 los muertos y en mil 301 heridos desde el pasado 7 de diciembre cuando iniciaron las protestas, tras la destitución y posterior encarcelamiento del expresidente Pedro Castillo.