Turquía bombardeó objetivos del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en el Kurdistán iraquí, horas después de un atentado suicida de esta organización que dejó dos heridos en el centro de la capital, Ankara.
El PKK, grupo armado considerado terrorista por Turquía y por países occidentales, reivindicó el ataque ocurrido horas antes de la apertura de la nueva sesión parlamentaria que debe validar la entrada de Suecia a la OTAN.
En su discurso en esa sesión, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, dijo que “los desquiciados que amenazan la paz y la seguridad de los ciudadanos no lograrán jamás sus objetivos”.
El ataque suicida estuvo dirigido contra la sede de la policía. El ministro de Interior, Ali Yerlikaya, explicó a la prensa que uno de los asaltantes se hizo explotar y el otro fue abatido “de un disparo en la cabeza“.
Es el primer ataque que reivindica el PKK desde uno en septiembre de 2022, en el que murió un policía.
En respuesta, Turquía lanzó una “operación aérea” en el norte de Irak para “neutralizar el PKK” en el que destruyeron “20 objetivos utilizados por terroristas”, informó el Ministerio de Defensa.
“Los aviones del ejército turco bombardearon sectores (…) de la región de Bradost hacia las 21:20 hora local, así como la aldea de Badran”, indicó a AFP Ihsan Chelabi, alcalde de Sidakan, en el Kurdistán iraquí, cerca de la frontera con Turquía e Irán.
Potente explosión
La sede policial atacada se sitúa dentro del recinto del Ministerio de Interior, en una zona que alberga otros edificios gubernamentales y el Parlamento.
La explosión, ocurrida a las 09:30 hora local, se escuchó a varios kilómetros a la redonda e hirió a dos policías, cuya vida no corre peligro, precisó el ministerio.
Un video grabado por una cámara de seguridad muestra un vehículo gris que se estaciona lentamente frente a la sede de la policía. Uno de los atacantes se baja del auto y avanza con un arma en la mano antes de inmolarse frente a la garita del policía de guardia.
Un segundo hombre sale del vehículo, pero desaparece de las imágenes, engullido por el humo y el polvo levantados por la explosión. Después es abatido por la policía.
El ministro del Interior pidió a la prensa dejar de difundir las imágenes del atentado en redes sociales.
Entrada de Suecia a la OTAN
A pesar del ataque, el Parlamento mantuvo “sin cambios” la sesión destinada a validar la entrada de Suecia a la OTAN, bloqueada durante meses precisamente por las diferencias entre Estocolmo y Ankara sobre los movimientos kurdos.
Desde mayo de 2022, Turquía retrasa la entrada del país escandinavo a la alianza militar reprochando la clemencia de Estocolmo hacia los “terroristas” y los movimientos kurdos.
Erdogan también presiona a Suecia para que tome medidas contra las profanaciones del Corán que han tensado sus relaciones.
En julio, Turquía y también Hungría levantaron sus vetos contra el ingreso de Suecia, pero han tardado en ratificar su adhesión.
El primer ministro sueco, Ulf Kristersson, rápidamente aseguró que su país “confirma una vez más su compromiso a favor de una cooperación a largo plazo con Turquía en la lucha contra el terrorismo“.
Numerosos países extranjeros y la misma Unión Europea expresaron su “solidaridad” y condenaron el atentado.
Ankara ha sido escenario de numerosos y violentos ataques, sobre todo durante los años 2015 y 2016, muchos reivindicados por el PKK, que lucha contra el Estado turco desde 1984, o el grupo Estado Islámico.
Erdogan advierte a la Unión Europea
En su discurso parlamentario, Erdogan fue especialmente duro contra la Unión Europea, a quien reprochó haberle hecho “aguardar desde hace 40 años en su puerta”.
“Nosotros cumplimos todas las promesas que le hicimos a la UE, pero ellos no han cumplido casi ninguna de las suyas”, dijo el presidente, agregando que no “tolerará nuevas exigencias o condiciones al proceso de adhesión” de Turquía.
“Si la UE tiene la intención de poner fin al proceso de adhesión que solo existe en el papel, esa será su decisión”, agregó.
La furia del presidente ocurre luego de que la Corte Europea de Derechos Humanos reprochó a Turquía por condenar a un hombre por pertenencia a una organización terrorista armada, basándose en el simple uso de la aplicación de mensajería criptada ByLock. ByLock es considerada por el gobierno turco como el instrumento de comunicación favorito de los presuntos responsables del golpe fallido de 2016, que causó 250 muertos y provocó detenciones y purgas sin precedentes en la historia turca.