A tres días de que Donald Trump llegó a la Casa Blanca, los albergues en Ciudad Juárez, Chihuahua no han recibido a personas migrantes mexicanas que hayan sido deportadas por autoridades estadounidenses, aseguraron autoridades federales tras un recorrido.
“Estos días no ha habido este movimiento como regularmente sucede. En este momento no, es lo que nos ha informado la Presidenta en la mañana, de hecho, lo informó, y estaremos en coordinación con el Instituto Nacional de Migración (INM), detalló la secretaria de Bienestar, Adriana Montiel.
Desde el pasado lunes, día uno en la segunda era Trump, el albergue “Leona Vicario” y “La Casa del Migrante” están listos para recibir a los paisanos retornados, pero, hasta ahora, nadie ha solicitado refugios.
Respecto a ello la coordinadora de la “La Casa del Migrante”, Ivone López de Lara reiteró que no han llegado personas migrantes mexicanas deportadas de Estados Unidos, pero se mantienen a la espera.
Es necesario mencionar que en el puente fronterizo más importante de la ciudad “Paso del norte”, que divide a Juárez de “El Paso”, Texas, el tránsito de ida y vuelta es habitual como ha ocurrido en las pasadas administraciones estadounidenses.
De hecho, en la vecina “El Paso”, el alcalde electo, Renard Johnson, confirmó que esa ciudad no participará en las redadas migratorias ordenadas por Washington debido a que la policía local no tiene recursos para ejecutar esa ley ordenada por Donald Trump.
Mientras tanto, quienes sí se benefician de los albergues, que llevan años operando, son las personas migrantes extranjeras que se quedaron varados por la cancelación de las citas “CBP One”.
En estos lugares, se les brindan alimentos, refugio ante las bajas temperaturas, servicio médico y hasta atención sicológica.
“Gracias a Dios, aquí nos dan buenas cobijas, buenos abrigos, pues, nos colaboran mucho, pues para el frío, porque sinceramente hay veces que no se soporta el frío, mucho frío”, comentó Gerson, originario de Venezuela.