El titular de la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo (FGE), Óscar Montes de Oca, confirmó la presencia en el estado de diversas organizaciones criminales dedicadas a la venta de droga y otros delitos del fuero federal, entre las que se encuentran el Cártel de Sinaloa, el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y células del Cártel del Golfo y de Los Zetas.
Asimismo, negó que la población y los turistas que se encuentren en el estado perciban un aumento en la inseguridad, pues aseguró que los índices delictivos han ido a la baja durante los últimos años.
En una entrevista, el funcionario aseguró que el año pasado se presentó un incremento de 300% en detenciones, lo cual se ha logrado gracias a las implementaciones tecnológicas que se han presentado al interior de la FGE, así como a la mejoría en la capacitación de personal en todas las aéreas de la dependencia.
Asimismo, Montes de Oca reveló que al año se abren alrededor de 45 mil carpetas de investigación, las cuales se acumulan con las 114 mil que ya estaban activas cuando asumió el cargo, de las cuales 60 mil ya fueron resueltas, además de que ha conseguido que no aumente el promedio de delitos investigados.
A pesar de los avances presentados, reconoció que la Policía Judicial aún sufre carencias debido a la falta de equipamiento y escasez de gasolina, pero expuso que ya se ha logrado mitigar algunas de las privaciones que existían cuando recibió el cargo, pues se compraron armas de fuego, chalecos antibalas y más vehículos.
Además, el fiscal aseguró que la presencia del crimen organizado en la entidad propicia que aumente el índice de todo tipo de delitos, pues manifestó que en Quintana Roo están presentes las dos organizaciones criminales más poderosas del país: el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación.
Los operadores de estas organizaciones son fácilmente identificados por los agentes de investigación, mismos que realizan las detenciones pertinentes para tratar de frenar con esta problemática, pero a pesar de arrestar a los dirigentes regionales de estos cárteles, los cabecillas siguen mandando a más gente para ocupar su lugar”, señaló.