El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas (FrayBa) y diversas organizaciones civiles lanzaron pronunciamiento ante la emergencia humanitaria que atraviesan los municipios de Pantelhó y Chenalhó, en Chiapas.
En las últimas semanas en la región de los Altos en Chiapas, se ha presentado una creciente ola de violencia y tensión derivada de la presencia del crimen organizado.
Las organizaciones Médicos del Mundo Suiza, la Comisión de Apoyo a la Unidad y Reconciliación Comunitaria y Desarrollo Económico y Social de los Mexicanos Indígenas (CORECO), con el acompañamiento internacional del Movimiento Sueco por la Reconciliación (SweFOR) y el Servicio Internacional para la Paz (SIPAZ), hicieron el llamado a una atención integral a la emergencia humanitaria.
En el documento señalan que el 10 de julio realizaron una misión de observación de derechos humanos al municipio de Chenalhó. En los hallazgos, el FrayBa y las ONG detallaron que documentaron 3 mil 205 personas desplazadas, “en su mayoría mujeres, ancianas, ancianos, niñas y niños, en los municipios de Chenalhó, San Cristóbal de Las Casas y San Juan Cancuc.
Además, dentro de las víctimas desplazadas “se encuentran personas defensoras de derechos humanos como la Organización de la Sociedad Civil Las Abejas de Acteal, quienes han sufrido amenazas constantes por su labor a favor de la paz y la no violencia”, detalla el documento.
Urgen a la garantía de necesidades básicas de alimentos, “principalmente: maíz, frijol, arroz, chayotes, papas, sal; así como de productos de higiene: jabón, toallas femeninas, pañales, etc., para sostener a las familias, así como el abastecimiento de leña para la cocción de alimentos en los campamentos de desplazados”.
Las ONG expresan preocupación “por el abandono de los cultivos de milpa, frijolar, traspatios y cafetales, así como por la inseguridad alimentaria y la dependencia de ayuda externa a las familias desplazadas”.
El comunicado asevera que identificaron, además, “diarreas, deshidratación aguda, enfermedades respiratorias y fiebres. Estos padecimientos pueden complicarse en personas con un estado nutricional inadecuado y en menores de 5 años, poniendo en riesgo su vida por complicaciones como la neumonía y la insuficiencia respiratoria. Se identificaron afectaciones a la salud mental de la población: llanto, tristeza y ansiedad”.
Denuncian que la situación deriva de la presencia del crimen organizado que busca el control territorial, a través de la confabulación de funcionarios públicos municipales; a ello se suma la violencia estructural que pervive en la entidad. Esto ha conllevado a la población “a generar procesos organizativos que tienen el objetivo de hacer frente al contexto de injusticia histórica”, afirma el comunicado.
Hicieron hincapié que de marzo al 5 de julio, el día que asesinaron al defensor de derechos humanos Simón Pedro Pérez López, se han registrado: 12 asesinatos, 1 desaparición y 2 heridos por arma de fuego (una mujer y un niño).
La organización Melel Xojobal junto a otras organizaciones como la Red por los Derechos de La Infancia y la Adolescencia en Chiapas (REDIAS) y la Red de Los Derechos de La Infancia en México (#REDIM), también se pronunciaron.
En contra de la violencia generada por el crimen organizado, la presencia paramilitar y otras fuerzas criminales que han expulsado y desestabilizado a las comunidades de la región de los Altos de Chiapas, afectando más gravemente a mujeres embarazadas, personas adultas mayores, niñas, niños y adolescentes”, expresaron en un comunicado.
Enfatizaron que según datos de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, A.C. (CMDPDH), del 2006 al 2018 se registraron en Chiapas más de 5 mil 035 personas indígenas desplazadas por conflictos internos, siendo uno de los estados más afectados del país.