Por cuarto año se lleva a cabo el encendido de luces multicolor del inmueble del Senado de la República, para conmemorar esta fecha, pero este año también para recordar que “no hay nada que curar”.
La noche de este jueves, el Senado de la República, ubicado en la alcaldía Cuauhtémoc, se iluminó con los colores del arcoíris para conmemorar el Día Internacional contra la Homofobia, Lesbofobia, Transfobia y Bifobia.
Alrededor de las 20:26 horas el inmueble principal se iluminó con luces multicolores luego de que activistas y senadoras las encendieron.
El encendido se lleva a cabo desde hace cuatro años y en esta ocasión, en donde finaliza la actual LXV Legislatura, tiene un especial significado dado que también es para conmemorar que “no hay nada que curar” dado que se hace en el marco de la reciente aprobación de la iniciativa para prohibir y erradicar las mal llamadas terapias de conversión en nuestro país.
Previo al encendido de las luces multicolor, activistas y legisladoras dieron una conferencia de prensa en donde recordaron el camino que enfrentaron para impulsar la ley para prohibir los Esfuerzos para Corregir la Orientación Sexual y la Identidad de Género (ECOSIG).
“Las ECOSIG no son otra cosa que falta de humanidad, son ignorancia e intolerancia. Disfrazan la homofobia y transfobia, el rechazo y miedo a la diversidad, con supuestos tratamientos psiquiátricos, psicológicos y consejería espiritual, con la intención de modificar algo tan íntimo y único como es la orientación sexual o identidad de género de una persona”, externó la senadora Alejandra Lagunes (PVEM) durante su intervención.
La homosexualidad no es una enfermedad mental
Recordaron que, desde hace 34 años, la Organización Mundial de la Salud (OMS) eliminó la homosexualidad de su lista de enfermedades mentales, y que, de acuerdo con un informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), 98% de personas que fueron sometidas a estas prácticas sufrieron daños irreparables dado que son tortura y no existe evidencia científica de su eficacia.
“Es una deuda histórica reparar los daños a la comunidad, porque es responsabilidad del Estado proteger y garantizar los derechos humanos de todas las personas […] no hay nada que curar”, agregó la senadora del Partido Verde.
Fernanda Félix, diputada federal, recordó que hay un momento crucial con la lucha por la dignidad de las personas y que en la Cámara de Diputados y en la actual Legislatura hay representantes políticos que todavía siguen lanzando discursos de odio; dijo que en nuestro país todavía hay asesinatos a la comunidad sexodiversa por lo que “se debe reflexionar sobre los errores que seguimos cometiendo como sociedad”.
La senadora Patricia Mercado, una de las que impulsó esta iniciativa, refirió que para que sea una realidad la prohibición de las ECOSIG, aún debe atravesar un largo proceso, y recordó que fue difícil empujarla, incluso, fue aprobada y votada el último día, de la última sesión y fue el último dictamen.
A este evento acudieron representantes de la sociedad civil como Iván Tagle, director de Yaaj México, organización que dio impulso a esta ley, que agradeció el trabajo en conjunto que hizo la sociedad civil y las senadoras. También acudió el embajador de España, Jorge Duarte.
“No sólo se aprobó a nivel federal, se impulsó en 18 congresos locales de 32. Hay que darle seguimiento para que se aprueben, pero esa es la lucha colectiva que hay que seguir dando […] La lucha por los derechos humanos y la defensa y diversidad es una lucha diaria colectiva y afectiva […] es un llamado […] a construir una agenda legislativa para el próximo sexenio y legislatura, porque ese sector neofascista odia la diversidad en cualquier expresión”, recordó la senadora morenista Citlalli Hernández.
Este acto conmemorativo es el último que se da en la actual LXV Legislatura.