La primera consulta popular nacional del próximo 1 de agosto es vista por sus detractores como una farsa, sin embargo, para las víctimas de crímenes de Estado es vista como una oportunidad para luchar contra la impunidad que ha existido por décadas en México, así lo expresaron Omar García y Ariadna Bahena, víctimas de crímenes, en una entrevista con Once Noticias.
Omar es sobreviviente de los ataques que derivaron en la desaparición de 43 estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, ocurrida el 26 de septiembre de 2014, en Iguala, Guerrero.
Adriana es víctima de desplazamiento de su lugar de origen en Guerrero, en la zona conocida como Tierra Caliente. Además, cómo muchas mujeres en el país, también ha sido víctima de la violencia de género.
Cuando se les pregunta sobre las personas que están en desacuerdo con la consulta popular y afirman que la justicia no se consulta, Omar García responde de forma contundente, con cifras: “a mí me gustaría empezar con quienes dicen que la ley no se consulta, se aplica. Bueno, vivimos en un país de impunidad, 98% de las denuncias no proceden y cuando proceden alegan persecución política, entonces cuando se aplica la ley contra Cárdenas Palomino, contra Genaro García Luna, contra Guajardo, contra Rosario Robles, o contra cualquier personaje en la era reciente, alegan persecución política, entonces de qué estamos hablando”.
Habría que ver quiénes son esos detractores para entender por qué las narrativas que desprestigian un ejercicio tal cual, además de que las consultas populares, lo puedo decir así, son ejercicios de primer mundo, son muchas las consultas populares que se hacen en Suiza y en los países nórdicos, esos mismos países a los cuales mucha gente que ataca la consulta quieren parecerse a ellos, y sin embargo, cuando hablamos de consulta ahí ya no les conviene”, asegura Omar.
Para Ariadna, la consulta popular no se trata de una farsa como muchos han dicho, sobre todo en redes sociales como Twitter, sino por el contrario, lo ve como un ejercicio ciudadano que reivindica el derecho a decidir.
“En redes sociales, en estos espacios bastante burdos como Twitter, donde nada más se discute desde una comodidad y no se está haciendo un activismo en las realidades, decirles que el ejercicio de la consulta popular más allá de la temática es justamente dar la discusión en torno a las posturas y podemos estar quienes estemos defendiendo el ‘Sí’, para acceder a la verdad y la justicia y tener ejercicios de memoria histórica poder establecer garantías, y puede haber la postura del ‘No’ claramente pero también que se dé el debate desde ese lado, por qué este ejercicio no representa para ese sector que podamos evidenciar el sistema de impunidad que existe en México pero que no llamemos a abstenernos, porque abstenernos es coartar un derecho que tenemos la ciudadanía, participar en los procesos políticos”, destaca Ariadna Bahena.
“Por ahí he visto muchos comentarios de que esto es una farsa y les reiteramos, una farsa en qué sentido, porque hemos cumplido, la ciudadanía ni Omar ni yo, cada uno de los pasos de la Ley de Consulta Popular para que este ejercicio se lleve a cabo y a final de cuentas quien lo está avalando y respaldando es la Suprema Corte de Justicia, entonces si nuestro máximo órgano de justicia está estableciendo que este ejercicio va apegado a la constitucionalidad y a la legalidad, entonces no entiendo la finalidad de estos argumentos”, afirma Adriana Bahena.
Ambos activistas, y víctimas de la impunidad y la corrupción, decidieron el año pasado conformar un Comité Promovente de la Consulta Popular, e incluso, lograron recolectar más de 2.5 millones de firmas ciudadanas que llevaron al Senado de la República para solicitar una consulta popular, sin embargo, cuentan que debido a la burocracia y tramitología que contempla la Ley Federal de Consulta Popular, su propuesta no entró a tiempo ya que la del presidente Andrés Manuel López Obrador llegó antes y la propuesta ciudadana ya no tuvo lugar pues de acuerdo con las autoridades ya era redundante.
El ejercicio de solicitud para realizar esta consulta popular nacional desde la vía legal inicia formalmente con un aviso de intención que tanto Omar como yo entregamos al Senado de la República, en el cual fue de fecha de 27 de agosto de 2020 y hubo un proceso de recolección de firmas en septiembre del año pasado que duró 15 días, donde nos involucramos la ciudadanía dentro del país y fuera del país participando con mesas receptoras, con diferentes tipos de brigadas en donde estábamos solicitando a todas y todos a que saliéramos a participar para consolidar este primer ejercicio. Fue hasta el 15 de septiembre que entregamos ante el Senado 2.5 millones de firmas que recolectamos todas y todos a lo largo y ancho del país”, cuenta Adriana Bahena.
Para ambos jóvenes activistas la consulta popular que se celebrará el próximo 1 de agosto es un ejercicio que marcará la historia, pues ambos esperan que no se trate de un ejercicio único, sino que pueda repetirse conforme la ley lo permita y entonces la próxima consulta sea el preludio de una era de consultas populares a nivel nacional en México.
Para mí es significativo porque abona a la construcción de la democracia de la intervención cada vez más marcada de la población en asuntos públicos, yo siempre he sido partidario de eso, nunca estoy de acuerdo en dejar todo en manos de las instituciones o de los gobernantes porque, o bien nos juegan chueco a la población o bien hacen mal las cosas”, subraya Omar.
Para Ariadna, es el inicio de la reivindicación de la participación ciudadana en decisiones históricas, pues afirma que antes nunca se le preguntó a la gente sobre temas trascendentales.
“Sí vemos que en realidad es un momento histórico, está abriendo una brecha bastante interesante, nosotros lo planteamos como el primer ejercicio de muchos que vienen por delante de esta era de las consultas populares donde precisamente el preguntarnos a la ciudadanía, el pueblo mexicano cualquier decisión que se va a tomar desde gobierno es como la constante ahora que nosotros y nosotras planteamos desde este ejercicio democrático”, expresa Ariadna.