El Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en colaboración con el World Justice Project, lanzó un reporte de Indicadores de Gobernanza Ambiental (IGA) para América Latina y el Caribe. Éste representa el primer análisis internacional sobre la gobernanza ambiental en la región.
La evaluación se realizó en 10 países: Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Jamaica, Perú, República Dominicana y Uruguay.
El reporte considera que las buenas prácticas ambientales son necesarias para procurar un desarrollo que respete el medio ambiente y que resulte beneficioso para la economía y la salud de las comunidades.
A pesar de que la mayoría de los países han adoptado esta visión en sus cuerpos normativos, en la práctica las acciones necesarias para conservar los ecosistemas en donde se desarrollan dichas sociedades no han correspondido a los objetivos ambientales plasmados en sus leyes.
El reporte sobre los IGA muestra esta situación. A través de la evaluación de 11 indicadores, el proyecto pretende mostrar tendencias regionales, así como áreas de oportunidad en las que los países pueden beneficiarse de las buenas prácticas en la materia de sus vecinos.
Los datos presentados en el reporte fueron juntados por más de 500 especialistas ambientales, entre los que se encuentran abogados, consultores de gestión, académicos y organizaciones no gubernamentales (ONG).
Los indicadores ambientales evaluados son:
- Regulación y cumplimiento
- Participación ciudadana
- Derechos fundamentales sociales y ambientales
- Acceso y calidad de la justicia
- Calidad del aire y clima
- Recursos y calidad del agua
- Biodiversidad
- Bosques
- Océanos, mares y recursos marinos
- Gestión de residuos
- Extracción y Minería
Las calificaciones de estos indicadores muestran resultados ponderados de más de 100 factores que se tomaron en cuenta para obtener una evaluación objetiva y comparable.
El estudio de IGA goza con varias características que lo diferencian de otros proyectos. En primer lugar, analiza la gobernanza ambiental en la práctica, evaluando la implementación, más que la formulación, de la normatividad aplicable. Otro diferenciador es el enfoque exhaustivo y multidimensional del estudio, que contempla diferentes fuentes de información y cuyos indicadores muestran diferentes aristas del problema. Un tercer factor destacable es que el reporte presenta nuevos datos tantos de fuentes oficiales como no gubernamentales, dotándolo de un carácter integral. Finalmente, un cuarto elemento especial es que los IGA fueron construidos adaptados a la realidad cultural de cada uno de los países participantes.
- ¿Cuáles son los resultados de esta evaluación?
El principal hallazgo del estudio es que existe una importante discrepancia entre lo formulado en materia ambiental y las prácticas de hecho. Esto muestra un rezago en la implementación y el cumplimiento de las leyes a nivel regional.
Un segundo resultado es que las agencias y dependencias encargadas de implementar las políticas ambientales en América Latina en general presentan limitantes financieras y de personal para cumplir con sus encomiendas.
Una tercera tendencia encontrada por el estudio es que, a pesar de que varios países reconocen los derechos de libertad de expresión, opinión y asociación, las organizaciones no gubernamentales en materia ambiental suelen enfrentar obstáculos para ejercer libremente su trabajo.
En los 10 países evaluados, se encontró constantemente que existen pocos incentivos para mitigar la contaminación del aire, del agua y para el manejo de residuos. Esto muestra que, en estos países, existen pocos esfuerzos para prevenir y disminuir algunos de los principales contaminantes en estos rubros.
Un reto común para la región, encontrado a través del estudio, es la necesidad de mayor transparencia en las industrias de la minería y de la extracción. El proyecto encontró que especialmente en las empresas petroleras, gaseras y mineras hay poca claridad en cuestiones ambientales.
A pesar de que se tienen la concepción de que el desarrollo económico guarda una importante correlación con el desarrollo de políticas ambientales, el estudio muestra importantes excepciones. Por ejemplo, Costa Rica, a pesar de un menor nivel de desarrollo económico que otros países evaluados, muestra altas calificaciones en los indicadores utilizados, lo que señala importantes avances en gobernanza ambiental.
Consulta el reporte completo para ver los perfiles de los países y los resultados completos.