Ser padres no es una tarea sencilla. Tampoco existe un manual de cómo llevar una crianza feliz y eficaz en niños. Sin embargo, no todo está perdido. De acuerdo con Kidshealth, un blog del Hospital Nemours Children´s Health, de Orlando Florida, existen cinco consejos que podrían ayudarte a sobrellevar la crianza de un niño de manera que ellos se sientan más felices y tú, como padre o madre, puedas sentir que estás haciendo un trabajo excelente. 1.- Estimula la autoestima de tu pequeño.- Los niños comienzan a desarrollar su sentido del “yo” desde que son bebés, cuando se ven a sí mismos a través de los ojos de sus padres. Tus hijos asimilan tu tono de voz, tu lenguaje corporal y todas tus expresiones. Tus palabras y acciones como padre tienen un impacto en el desarrollo de su autoestima más que ninguna otra cosa. El elogio de los logros, aunque sean pequeños, hará que los niños estén orgullosos; permitirles que hagan cosas por sí solos los hará sentir que son capaces y fuertes. Por el contrario, los comentarios denigrantes o las comparaciones negativas con otros niños los hará sentir inútiles. Evita las afirmaciones tendenciosas o usar palabras hirientes. Los comentarios tales como “¡Qué estupidez!” o “¡Te comportas más como si fueras un bebé que tu hermano pequeño!” pueden causar el mismo daño que los golpes físicos. Elije las palabras con cuidado y sé compasivo. Dile a tus hijos que todas las personas cometen errores y que tú aún los amas, incluso cuando no apruebes su comportamiento. 2.- Reconoce las buenas acciones.- ¿Cuántas veces al día tienes reacciones negativas para con esos pequeños? ¿Cómo te sentirías si un jefe te tratara de un modo tan negativo, incluso si fuese con buenas intenciones? El enfoque más positivo es reconocer las buenas acciones de los niños: “Hiciste la cama sin que te lo pidiera, ¡eso es genial!” o “te estaba mirando mientras jugabas con tu hermana y fuiste muy paciente”. Estos comentarios serán mucho más eficaces para alentar la buena conducta a largo plazo que las reprimendas continuas. Proponte hallar cómo elogiarlo todos los días. Sé generoso con las recompensas: tu amor, abrazos y elogios pueden hacer maravillas y suelen ser suficiente gratificación. 3.- Establece límite y sé coherente con la disciplina.- En todas las casas es obligatorio y muy necesaria la disciplina. El objetivo con ésta es ayudar a que los niños elijan los comportamientos aceptables y aprendan a autocontrolarse. Es posible que pongan a prueba los límites que establecidos, pero son imprescindibles para que ellos se conviertan en adultos responsables. Poner reglas en la casa ayuda a que los niños entiendan sus expectativas y desarrollen el autocontrol. Algunas reglas pueden ser: no mirar televisión hasta terminar las tareas y no permitir los golpes, los insultos ni las burlas hirientes. Es recomendable implemente reprimendas en caso de no obedecer ciertas reglas. Un error frecuente que cometen los padres es no seguir adelante con las consecuencias. No puedes disciplinar a los niños por una mala contestación un día e ignorar el hecho al día siguiente. Ser consistente les enseña qué es lo que tú esperas. 4.- Haz un espacio para tus hijos– A menudo es difícil que los padres y los niños se reúnan para una comida en familia y ni pensar en pasar juntos tiempo de calidad. Sin embargo, es probable que no haya nada que a los niños les gustaría más que eso. Intenta levantarte 10 minutos antes a la mañana para poder desayunar junto a ellos o deja los platos en el fregadero y sal a caminar después de cenar. Los niños que no reciben la atención que desean de sus padres a menudo sobreactúan o se comportan mal porque, de ese modo, están seguros de que recibirán su atención. Asistir a conciertos, juegos y otros eventos con el adolescente es una forma de transmitir afecto, y te permitirá conocer otros aspectos sobre tu hijo y sus amigos que son importantes. No te sientas culpable si eres un padre que trabajas, al contrario, eso es un orgullo. 5.- Debe ser un buen modelo a seguir.- Los niños pequeños aprenden mucho sobre cómo actuar al observar a sus padres. Cuanto más pequeños, más lo imitan. Antes de reaccionar agresivamente o enfurecerse frente a tu hijo, piense en lo siguiente: ¿es así como deseas que el niño se comporte al enfadarse? Ojo: los hijos siempre observan. Los estudios han demostrado que, por lo general, los niños que dan golpes imitan el modelo de agresión de sus casas. ¿Cuáles son las cualidades que deseas cultivar en tus hijos?, seguro son respeto, cordialidad, honestidad, amabilidad, tolerancia. Sé generoso. Haz cosas por los demás sin esperar una retribución. Expresa tu agradecimiento y haz elogios. Trata a tus hijos como esperas que te traten a ti.