El dengue es una enfermedad causada por un virus y se transmite a las personas por la picadura de los mosquitos hembras pertenecientes a las especies Aedes, particularmente A. aegypti y A. albopictus infectados.
El dengue no se transmite de una persona a otra y actualmente no hay vacuna para combatirlo.
Es común en regiones tropicales y subtropicales como Centroamérica, Sudamérica y lugares donde se estanca el agua.
Existen 3 manifestaciones diferentes de la enfermedad, que son:
- Fiebre de dengue
- Fiebre hemorrágica
- Shock hemorrágico
En casos graves, el dengue puede complicarse convirtiéndose en dengue hemorrágico, cuando se presentan sangrados tanto internos como externos. O en shock hemorrágico, cuando la sangre no fluye a los órganos principales del cuerpo, lo que puede causar la muerte.
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas del dengue, conocido comúnmente como “trancazo” o “fiebre quebrantahuesos”, aparecen después de un periodo de 4 a 7 días. Se presentan como:
- Fiebre
- Dolor de huesos
- Dolor de cabeza intenso (en la frente)
- Dolor de ojos (que se incrementa al moverlos)
- Erupción en la piel (parecida al sarampión)
- Náuseas
- Vómito
- Insomnio
- Prurito (comezón)
- Falta de apetito
- Dolor abdominal
En casos graves:
- Hemorragia
- Convulsiones a causa de la fiebre
- Deshidratación severa
Ante un caso sospechoso de dengue, se deben realizar pruebas de sangre, dependiendo de la evolución de la enfermedad:
- Si la infección es aguda (días 1 a 5 del inicio de los síntomas), se debe tomar una muestra de sangre en busca del virus (RT-PCR en tiempo real ó NS1).
- Si la infección se encuentra en la fase de recuperación o convalecencia (a partir del 6to día del inicio de síntomas), se tomará una muestra de sangre para detectar anticuerpos IgM e IgG.
El tratamiento del dengue se dirige al alivio de los síntomas: reposo, abundantes líquidos, paracetamol para el alivio de la fiebre y hospitalización para los casos graves.
No se aconseja la automedicación. Tampoco se aconseja el uso de aspirina debido al riesgo de sangrado y el riesgo de desarrollar Síndrome de Reye en niños menores de 12 años, ni el uso de otros antiinflamatorios no esteroideos (naproxeno, diclofenaco, ketorolaco, etc.).
¿Cómo prevenirlo?
- Usa ropa que cubra la mayor parte de tu cuerpo
- No te expongas a la picadura de los moscos
- Usa repelente contra mosquitos
- Usa un pabellón o tela que cubra tu cama por completo
- Instala mosquiteros en puertas y ventanas
- Evita que se acumule basura
- No dejes recipientes donde se acumule agua
- Lava constantemente contenedores de agua, así como tinacos y cisternas
- Utiliza larvicidas en contenedores para eliminar larvas de mosco
- Usa insecticidas especiales para eliminar el mosco en su fase adulta