En el devastador incendio forestal que arrasó una parte del archipiélago estadounidense de Hawái, aumentó a 89 el número de personas fallecidas, mientras continúa la búsqueda de más sobrevivientes o cuerpos entre el millar de desaparecidos.
Las autoridades permitieron a los ciudadanos de las zonas más afectadas el retorno a sus hogares, la mayoría en ruinas y arrasadas por el fuego.
Aunque más de mil 400 personas permanecen en albergues de emergencia.
La fiscal general de Hawái, Anne López, anunció la apertura de una investigación sobre cómo fue manejada la crisis, tras las quejas y críticas de los residentes porque no hubo advertencias sobre el incendio, que dejó atrapada a la gente.
“Entré en pánico porque mis hijos todavía estaban aquí, no sabía si habían salido, perdí la comunicación con ellos y finalmente salieron, fue un caos de locos. No sé si estaban dando suficiente aviso. Básicamente, viste el fuego y solo tuviste que correr”, dijo Jordan Chee, habitante de Lahaina, Maui.
En tanto, la canciller de México, Alicia Bárcena, reportó en redes sociales que personal del consulado general en san francisco, california, ya se encuentra en Maui, Hawái, atendiendo a personas mexicanas afectadas por los incendios.
En la localidad de Lahaina, en las Islas Maui, comunidades enteras fueron destruidas.
“Lo único que puedo decir de manera egoísta es que duele. Realmente te afecta emocional, mental y, por supuesto, físicamente”, señaló Anthony LaPuente, habitante de Lahaina, Maui.
El cuerpo de bomberos continúa trabajando por tierra y desde el aire para sofocar los últimos frentes de fuego.