Familias pudieron abrazarse de nuevo después de varias décadas alejadas, desde que los más jóvenes emigraron de Yucatán en busca de un mejor futuro hacia Estados Unidos.
“Para buscar un futuro mejor, una estabilidad económica mejor, darles mayor oportunidades económicas a nuestros hijos, a nuestros padres que se quedaron allá”, dijo la residente de Novato, California, Reina.
El programa de reunificación familiar “Cabecitas Blancas”, del Gobierno de Yucatán, llevó a 166 adultos mayores a 14 localidades de la Unión Americana con visas de turista para ver a sus hijos.
“Los yucatecos están trabajando en el área de servicios, en esa área de San Francisco con gente metida en la cocina, trabajando de chefs, de encargados de cocina, de meseras”, señaló Juanita López, subdirectora de Atención al Migrante del Instituto para el Desarrollo de la Cultura Maya, Yucatán.
Residente en Santa Rosa California, José Manuel Lira Chi, oriundo del municipio de Petó, no veía a su madre, doña Tiburcia Chi, desde hace 18 años.
“La asimilé y viéndola en camino, la verdad sí lloré de ver a mi mamá, de no verla en tanto tiempo. ¡Cómo ha cambiado¡”, dijo José Manuel Lira, residente en Santa Rosa, California.
Este reencuentro fue más que anhelado, porque la pandemia lo retrasó.
Doña Daniela Díaz convivió de nuevo con su hija, Reina Catzín Díaz, en Novato, California.
“Sentí alegría, abrazar a mis hijos y verlos otra vez, para regresar otra vez a mi pueblo”, señaló la madre de Reina, Daniela Díaz.
La diáspora yucateca está en Arizona, Arkansas, California, Colorado, Las Carolinas, Oregon, Texas, Wisconsin y el Estado de Washington.
Para septiembre ya planean otro reencuentro.
“Tenemos una gran demanda al día de hoy de solicitudes recibidas en el Indemaya, y de las cuales trabajamos en combinación con el Consulado, para poder nosotros armar un segundo grupo”, dijo Juanita López.
“Que los amigos o paisanos que están aquí, que busquen el Programa porque creo que sí se puede, es cuestión nada más de moverse un poquito y ellos te ayudan con mucho gusto”, añadió José Manuel Lira.
Un migrante mexicano sólo puede entrar y salir de Estados Unidos si es residente permanente o ciudadano.
Y sin reforma migratoria que los regularice, los migrantes yucatecos no pueden venir a México, lo cual ahonda su nostalgia.
“Quisiera regresar de donde yo soy, y yo tengo muchas ganas de ir a visitar familia que tengo allí, amigos, hermanas, sí quisiera ir. Aquí es bonito y todo eso, pero ora sí como le llaman, es la “Jaula de Oro””, concluyó José Manuel Lira.