Salud

Se reduce 10% mortalidad por VIH en México: Censida

La reducción de la mortalidad es resultado de la Estrategia Nacional contra el Virus de Inmunodeficiencia Humana.

La mortalidad por el VIH en México, ha disminuido 10% entre 2018 y 2023, gracias a la implementación de la Estrategia Nacional contra el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), así lo informó Alethse de la Torre Rosas, directora general del Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH y el Sida (Censida).

Durante la sesión “Política nacional de VIH y el impacto económico en México” del Sistema Educativo de Salud para el Bienestar del IMSS Bienestar (Siesabi), De la Torre destacó los resultados positivos de esta estrategia, que ha logrado ahorros significativos de 2 mil 450 millones de pesos en 2023.

La Estrategia Nacional se basa en un modelo integral de atención que abarca desde la infancia hasta la edad adulta, con un enfoque en la triple optimización: clínica, poblacional y económica.

Esta política nacional incluye, entre otras medidas, la eliminación de la hepatitis C, una respuesta integral a la pandemia de COVID-19 en personas con VIH, y la optimización de tratamientos para menores de edad.

De la Torre subrayó que la estrategia también ha llevado a la actualización de la NOM-010-SSA-2023, que regula la prevención y el control de la infección por VIH.

“Entre 2018 y 2023, disminuyó 10% la mortalidad por esta causa”, indicó De la Torre, quien también resaltó un incremento de más del 10% en el número de personas que han sido diagnosticadas y que reciben atención durante 2023.

México cuenta actualmente con 355 hospitales y unidades especializadas en la atención del VIH, donde se ha mejorado el servicio gracias a la creación de redes de atención integral.

Adicionalmente, se han establecido convenios entre instituciones de salud para eliminar brechas de atención y ampliar la cobertura de los servicios médicos.

La directora de Censida también enfatizó la importancia de la prevención combinada, incluyendo la profilaxis pre y posexposición (PREP y PEP), que ayuda a prevenir nuevos casos de VIH.

“Estamos comprometidos a mantener una estrategia integral para garantizar justicia a las personas con VIH”, concluyó De la Torre, destacando el enfoque en la promoción de la salud sexual, la seguridad del paciente, y la igualdad de género como componentes clave para una atención integral.

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